miércoles, diciembre 13, 2006

El suceso Comisión Europea



Gentuza:

Durante el pasado mes de Noviembre tuve la oportunidad de visitar Bruselas por un asunto "Rockanrollista",ya saben que Los Malditos Mojarras son ya una banda de reconocido prestigio a nivel europeo y que entre nuestros fans se encuentra un público inglés de alto nivel de conocimiento musical.No he podido dar las gracias a Clara de la Torre que una vez más a demostrado una paciencia sin límites con una panda de impresentables dormilones y por cierto que tampoco he podido ver a Christine porque hay una moda francoparlante de atracción por lo negro inexplicable que le hizo ir a Sudáfrica.

Imaginen que les invitan a una cena,hay que ser muy atrevido para invitar a Los Malditos Mojarras a una cena,y en esa cena el anfitrión es un alto, altísimo funcionario español con sus años de experiencia que ha luchado por el bien de la Unión y ha ganado su puesto por mérito y capacidad.

Entonces alguien suelta el tópico "Los españoles son unos vagos" ,por supuesto que después de dos o tres copas de vino, que descarga de culpabilidad, pero el mal está hecho.A medida que la tertulia sobre el tema empieza a desarrollarse, llegan joyitas
varias: " Los españoles se tocan los huevos..." "Si yo lo veo en mi curro".Y todo esto bajo la atenta mirada de una médico francesa cuyo marido es español.

El vino sigue su curso y se profundiza aún más en la filosofía de los hábitos laborales del español medio : "Joder, es que la gente se conecta a Internet y al e-mail y se toca los huevos", esta frase no deja de ser verdad pero los interlocutores empiezan a poner cierta cara de asombro.

Todo acaba con la diplomacia propia de gente educada que ignora los comentarios demasiado atrevidos,nuestra reputación acaba por los suelos una vez más y como colofón a la salida del "dinner" nos encontramos con un ser femenino de grandes dimensiones hija del altísimo funcionario que porta como complemento una gorra blanca del tamaño de una funda de almohada.

Nuevamente ese "savoir faire" sólo puede producir un comentario "trés bizarre":

- Y esa gorra te la han dado en el Marca ¿no?.

En fin... .

En la foto dos españoles de pro concentrados para levantar el país desde Lovaina.

El tema de hoy para Christine Simon, familia de los dueños de la empresa de los enchufes,interruptores y agujerillos varios.

Te lo digo.




Hormon wells

8 Comments:

Blogger H.Wells y X.Bea-Murguía said...

jajajaajajajajajjaaja

Sin duda, sobredosis de Anís Aquis

Javier

13 diciembre, 2006 10:28  
Anonymous Anónimo said...

Joder es que se sale el amigo.
Que ínclito.

13 diciembre, 2006 11:04  
Anonymous Anónimo said...

Pues mi opinión es para dar la contra a la entrada. Yo estuve varios años en una empresa alemana. Ya sabéis esos "cabeza cuadrada" a los que a las cinco en punto (como si fuesen ingleses de pro) se les caía el boli y "pacasa". Los jefes de todo el grupo estaban encantados con el departamento español, porque según aseguraba uno de ellos, que era un "carakartofen": "los españoles trabajan mucho fuera de su horario y además no cobran las horas extra". (Si, era un capullo).

13 diciembre, 2006 13:45  
Anonymous Anónimo said...

También tengo un par de anecdotillas más, una en un restaurante japonés y otra sobre un chino. La del japo la protagonizó el tonetti de mi marido, que ya sabéis que las suele preparar sin buscarlas. Creo que fue en Don Zoko, en donde el ambiente además de selecto es muy muy japonés. Cuando le trajeron el sushi le dijo al camarero: ¿Esto no será pescado crudo? Oiga que mi madre es de Bilbao y a mi por lo menos esto me lo pasa por la plancha. Podríamos decir en su favor que se había metido, entre pecho y espalda, un par de sakes.
En cuanto a lo del chino, cuentan las leyendas urbanas que un gallego montó un restaurante típico en Londres. Unos españoles que fueron allí invitados a comer se quedaron de piedra cuando un camarero chino les atendió, durante toda la velada, en un correctísimo gallego. Cuando al final de la comida el dueño del restaurante se acercó a la mesa para saludarles, los invitados le preguntaron que cuánto tiempo llevaba enseñando al chino a hablar en gallego. Este respondió: "no se lo digáis a nadie, pero él se cree que está aprendiendo inglés".

13 diciembre, 2006 13:56  
Anonymous Anónimo said...

jajajajjajaaa.Buenísmo.

13 diciembre, 2006 15:46  
Blogger H.Wells y X.Bea-Murguía said...

Esta entrada directa a mi buen nombre, tendrá su cumplida respuesta. Esto no va a quedar así.

Lo del Don Zoco es casi, casi cierto. Le falta la provocación previa del camarero, al que le pregunté el nombre y me dijo, con toda su cara de japonés del centro de Okaido, que se llamaba Manolo.

Pero bueno. Lo del chino no es una leyenda. Es cierto.

Javier

13 diciembre, 2006 18:45  
Anonymous Anónimo said...

Cierto, Murga. Muy cierto.

14 diciembre, 2006 10:27  
Anonymous Anónimo said...

Que conste que estoy de acuerdo contigo en todo Murga.Los horarios laborales de España son tercermundistas, es más, España es el líder en baja productividad.Se confunden más horas con más trabajo pero es justo lo contrario, a más horas antes me canso y empiezo a rascarme el badajo.


Pero que le vamos a hacer,somos latinos....dame una copa de vino........ .

14 diciembre, 2006 11:40  

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