lunes, enero 30, 2006

Apadrine a un cineasta


Amigos, amigas y otros (y otras):

anoche vi la ceremonia de entrega de los Goyars para cargarme de mala leche porque soy fiel a Andre Gide: "es con los buenos sentimientos con lo que se hace mala literatura". Es tal el morro que le echan algunos de ellos con ese discurso tan unívocamente correcto, de intelectual con ecolalia, con sus estólidos argumentos vacíos y sus tópicos, mucho tópico, más vistos que unas gafas de pasta rosiblanca que etiquetaban a una tipa con pinta de neurótica... ¡Que alguien le dé una pastilla o algo a esa pobre mujer!

Me acordé de lo que dice Jesús Llano siempre: "Apadrine a un estanquero". Pues eso mismo: "Apadrine a un cineasta". Se les ve que viven, prácticamente, en la indigencia, porque son un sector perseguido y muy injustamente tratado. Imaginen por un momento que ustedes son panaderos: ustedes están sometidos a las leyes de competencia de su mercado, que no se rigen sólo por la calidad del producto (yo creo en la calidad del cine español), sino también por la promoción, las relaciones con la gente del barrio (con el público), el precio... Las famosas pes del marketing. ¿Qué no daría usted porque llegara un ministerio y le dijera que le subvenciona, antes de saber si su producto es bueno o malo y, por tanto, si merece la ayuda o no, una buena parte de sus costes? El cine lo tiene. ¿Qué no daría usted por estar protegido por normas que obligan a los distribuidores a hacer sitio en sus estantes para su producto? Las cuotas de pantalla. ¿Y la competencia desleal, que existe en tantos sectores? ¿No querría usted que acosaran a los clientes de los que le hacen competencia desleal con campañas de publicidad y leyes con castigos ejemplares? La piratería. Y qué me dicen de esa sospechosa igualdad en los precios... Vale lo mismo ver "Torrente III" que "Match point"... Hamburguesa y solomillo, al mismo precio.

Si a todo esto añadimos, que es el único sector que, además, tiene cuatro horas al año la televisión en franja horaria chipén para sus proclamas... Concluyo: ¡POBRE CINE ESPAÑOL! Apadrine a un cineasta.

A mí el cine español me gusta. Hay de todo, claro, pero yo creo que, en general, es mejor que el cine comercial americano con mucho a pesar de que la gente del cine se está equivocando de plano porque ellos son auténticos privilegiados. Me gusta mucho Medem y Fernando León, me encanta Candela Peña, Ernesto Alterio, Ingrid Rubio... Alfredo Landa en Paco el Bajo de "Los Santos Inocentes" o en Fendetestas en "El bosque animado" o haciendo de sargento en "La vaquilla" ¡Sublime!

Se equivocan porque son como la Pepi-Cola, tratando de imitar siempre a la Coca-Cola, como si la gente fuera idiota. Tanto criticar al cine americano y llega la fiesta del cine español y lo llaman Academia, dan una estatuílla, hay cuatro nominados con cara de lelo en prime time, alfombra roja para que la ministra Calvo muestre sus lazos (¡esto es una ministra y no Ana de Palacio, que parece un cuagro de El Greco!), gags malos preparados... ¡Un cero patatero en originalidad! Y, claro, está el glamour con actores como... Santiago Segura o Antonio Resines, que es un despliegue glamour el de Resines haciendo de tabernero de "Los Serrano" que ya quisiera Billy Crystal... Tienen sus virtudes, pero Glamour... ¿Qué me dicen del trajecito de Conchita Velasco? ¡Hasta yo me fije! Terrible. Parecía, mismamente, una Scarlet O'Hara en Tara... zona.

Si hasta en la formulilla han copiado la cursilería correcta de los americanos. Ya lo dijo Santiago Segura: no se puede decir "Y el ganador es..." porque "and the winner is..." implica que hay tres loosers (perdedores) y eso no es correcto. Hay que decir "Y el premio va para...", es decir, "And the Oscar goes to..." Ridículo, no me digan.

El cine español es bueno, pero será mejor cuando se libere de sus complejos porque, yo no sé ustedes, pero si a mí me dan la oportunidad de colgar en mi casa la "Olimpia" de Manet o una copia... No me lo pienso: el original es "La maja desnuda" de, mira tú por donde, Goya.

X. Bea-Murguía

domingo, enero 29, 2006

Mens sana in corpore insepulto



Queridos amigos,

el nuevo imperio es la industria de la salud y su principal mercado, sus neuras. El afán por conseguir un cuerpo diez, como el de Diana, nos ha llevado a desterrar el ansia por alcanzar el Más Allá para llegar a un Más Acá sin esperanza: la misma fe sólo que la salvación se busca en este mundo. Creo poder garantizarles, sin confundirme demasiado, que ninguno de ustedes va a vivir un minuto más porque no se coman ese chuletón o porque se atiborren a soja: sólo harán que la riqueza se desplace del vacuno a la vacuna, de la granja al laboratorio.

Si no les he hablado antes de mi amigo Jesús Llano Muriel, no tengo perdón. Jesús disfruta, aún en la adversidad, llevado por un sentido de la vida epicúreo con un muy particular "collige, virgo, rosas", un atrapa los días (que son sólo dos), que contagia felicidad a quien comparte mantel con él. Si yo tuviera terapeuta, me recetaría una comida a la semana con Jesús, subvencionada por la Seguridad Social porque produce mejoras indudables en mi salud mental, aunque cause un pequeño deterioro a mi salud física.

Leo a Houellebecq, por consejo simultáneo de Hormon Wells y de mi padre, y me encuentro con esta perla: "Juventud, belleza, fuerza; los criterios del amor físico son exactamente los mismos que los del nazismo". Hay mucho de nazi en esa futura arcadia saludable. Que no les engañen. La salud pública es un abstracto insondable y carente de significado, una burda excusa para prohibir. La salud es un bien privado y su deber es administrar su propio bienestar para llegar a la tumba habiendo vivido con calidad. Es absurdo querer morir con una salud de hierro y es desconsiderado: demasiado peso para los porteadores de su ataúd.

Quien me conoce sabe que no soy amigo de excesos, pero los prefiero a las escaseces, sobre todo si la estrechez me es impuesta, porque me gusta ser administrador de mis placeres y no permito que ningún poder, ni político, ni mediático, me prive de la sal de la vida.

Con nuestra pasta, la farmacopea pública sólo financia raciones de vida emblistada y de colores para ganancia de una industria salvaje. En beneficio de mi salud, por el artículo 43 de la Constitución Española, exijo al Estado que me pague una comida a la semana con Jesús, con su ronsito o su Bombay y un puro para terminar entre risas. ¿Pueden imaginar ustedes algo más saludable? Háganme ustedes caso: su salud es suya, reclámensela al Estado, olvídense del "mens sana in corpore sano" que les esclaviza, una mente sana sólo puede habitar en un cuerpo vivo. ¿Que usted considera que se enfrenta al día con otro talante si echa un polvete mañanero con su dueño o dueña?... ¡Exija receta! Una semana de vacaciones en un todo incluido del caribe, tocándose el huevo, es mejor que veinte cajas de Prozac... ¡Exija receta!; una botella de vino en buena compañía, mucho mejor que veinte tomas de Sintrom (ni son)... ¡exija receta!; un culo como el de Diana, mejor que veinte Viagras... ¡exija receta (pero pida permiso antes)!

Anoche, en Laundromat, Diana llevaba una mirilla telescópica dibujada en ese culo que se movía de izquierda a derecha, como la mar inquieta, trasladando su vaivén rockero a los agitados ojos de los presentes, que iban de un lado a otro como en un partido de tenis entre la lujuria y la timidez. Durdi era un dardo que sintió envidia porque a mí se me atascó la cremallera y las manos blancas de Diana Cazadora no fueron diestras, sino zurdas, y no hubo manera de pasar el aprieto. En el mismo empeño de desatascarla fracasó Gonzalo Medina, por lo que, al final, me llevé a casa la cazadora... Quiero decir, el anorak... con la cremallera rota. ¡A otro perro con ese Acteón!

X. Bea-Murguía

Perdonen las licencias. Ayer me di cuenta de lo bien que casaban todas estas palabras y por eso lo he escrito. El blog no es la vida real, pero se nutre de ella. Manolo, felicidades. ¡34 años con ese cuerpazo y que te quiten lo disfrutado!

viernes, enero 27, 2006

Wells & Bea-Murguía, nuevos éxitos

Queridos amigos,

nuevos éxitos de Wells & Bea-Murguía con


un nuevo blog temático donde lo pasarán como en Eurodisney, pero sin subsaharianos disfrazados de ratón gigante. Si quieren saber qué es, no lo duden... Hagan clic.

Los enlaces irán directamente a la entrada, así que tengan en cuenta que, para volver a Wells & Bea-Murguía tendrán que pasar, primero, por la página principal del Personanismo.

Pondremos dos o tres enlaces, según vayamos perpetrando el Personanismo. De momento, esos dos enlaces están vacíos... Digo que están vacíos ¿vale?

Gracias y perdonen las modestias.

jueves, enero 26, 2006

Al fraile se le conoce por su hábito


Queridos amigos,

si yo fuera jersey, a ningún otro quisiera de dueño que a Evo Morales, un hombre que ya es conocido por su chompa. ¿Qué ha hecho Evo por Bolivia? Nada aún, pero... ¡Qué guapo el pullover! Una prenda de llama que ha dado yesca a la mecha del ansia compradora de los amantes del icono. Comunismo y consumismo más parecidos que nunca. Ya lo producen en serie y es casi la primera industria del altiplano. Todos quieren ahora un jersey de pura lana de llama andina, aunque no sea virgen. Ya veo las tiendas de la Quinta Avenida anunciando el kit completo para frikies de lo bolivariano: el pasamontañas de Marcos, la chompa de Evo, la guayabera de Chávez, la guerrera de Fidel y, por supuesto, el puro del Che. Adivino a Ralph Lauren y Lacoste en pie guerra por comercializar en exclusiva el jersey made in La Paz. No me dirán que no resulta contradictorio lo rápidamente que tiran del liberalismo más cruel los detractores del capitalismo.

Bromas aparte, yo no sé mucho de esto, quizá ustedes sí, pero la semiótica se empeña en que la saturación de significante siempre anula al significado, ya saben, el binomio inseparable de Ferdinand de Saussure disgregado por el hartazgo. Con la costumbre que tenemos todos de medir a Hércules por su pie, la afición a la metonimia en España es casi enfermiza, difícil lo va a tener Evo para que sus decisiones borren su chompa de nuestra retina, ese atuendo entre atlético y culé que ha hecho furor entre la progresía más reaccionaria. Ya se acuñan frases que pasarán al acervo popular, al boca a boca, como: "Estás más ridículo que Acebes con la chompa de Evo". Como si Acebes precisara de una chompa para parecer solemne.

Si lo piensan bien, no es el primer fraile al que se conoce por su hábito más que por sus hechos, este pobresito cocalero que aún no ha tenido tiempo ni de nacionalizar su país globalizado, ni de expulsar a toda inversión extranjera, ni de pegarse con Chile por una salida al mar. Así de sopetón, recuerdo el corpiño de Pedro J. (aunque yo jamás vi el controvertido vídeo, no por falta de oportunidades, sino porque la vida sexual de este señor no me mueve ni para cambiar de canal. Si hubieran pillado a Trinidad Jiménez vestida de dominátrix no lo habría dudado); el taparrabos de Gandhi, que es clavado al de Tarzán y que fue el último grito en Calcuta; la capa de San Martín de Porres, la chaqueta de pana de Alfonso Guerra o el yelmo de Mambrino de Don Quijote.

Sepan ustedes que la foto que pego, que nada tiene que ver con la chompa de Evo, es Murguía (Álava, inconfundible por su magnífico clima), pueblo de mi infancia del que tomo yo mi pseudónimo. Ayer, como quizá oyeron, ETA puso una bomba en esa casa que asoma a la derecha por entre la niebla, hoy Correos, antaño la Telefónica, justo al lado del matadero donde tantas veces fui con mis primos a presenciar ejecuciones vacunas. No ha habido muertos, pero he sentido una indignación en plena niñez que me sonroja las mejillas.

X. Bea-Murguía

Perdonen las erratas, pero esta mañana no me ha dado tiempo a repasarlo bien.

¡God bless America!


Queridos amigos,

puede haberles parecido lo contrario, por mis críticas a George W. Bush, el único presidente del mundo que se pone las chaquetas de papá (en el sentido real y en el alegórico), pero a mí me gustan los Estados Unidos de América... Suena el himno... Izan la bandera... Tengo la mano en el pecho... La derecha, la izquierda la tengo en el... En serio. Su discurso sobre la libertad y la tierra de las oportunidades, que en un tiempo en la historia fue, no me parece menos ridículo que las bobadas que dicen nuestros políticos patrios. Hagan un repaso y analicen sin pasión: "Alianza de civilizaciones"... "Nación de nacionalidades y comunidades"... "Tropas de paz" (precioso oxímoron, por otro lado)... "No fumar es de izquierdas"... "El Madrid no roba los partidos"... Son chorradas que se dicen para reforzar la conducta de la gente, no mojarse y ganar votos. No hay que tomárselo en serio ni sacarlo de contexto. La última frase de Super-Ratón tiene sentido en la serie, pero al final de la entrega de los premios Príncipe de Asturias resulta chocante.

La ola de antiamericanismo es igual que el boicot a los productos catalanes. Carece de sentido, porque generaliza, es decir, yerra. Hay una América deplorable, obtusa y contumaz y una América que da sopas con honda a la mayoría de la intelectualidad de pose castrista de aquí. Y no seamos niños, de la América deplorable a la América de las sopas Campbell, no sólo hay negros y caucásicos, hay una enorme variedad de grises. Son 300 millones, no lo olvidemos.

He instaurado en Nueva York la sede de mis anhelos y creo que eso es América... Norman Mailer y Paul Auster... Kevin Spacey y Jodie Foster... Ella Fitzgerald cantando "Cheek to cheek"... No quiero enumerar todo lo que me gusta de Estados Unidos porque lleno veinte entradas. Lo voy a resumir en lo que me dijo David Torres, un izquierdista que fuma con incoherencia, el martes: "América es Muhammad Alí y yo, ante Alí, me levanto".

El antiamericanismo es, a mi juicio, un fenómeno lerdo que no se diferencia en nada del anticatalanismo, del antivasquismo o del antiislandismo (que alguien habrá), aunque en parte es comprensible porque de Estados Unidos estamos importando lo peor (el binominio seguridad-libertad y la hipocresía social, la doble moral política y un puritanismo selectivo), y muy poco de lo bueno. Pensado con sensatez, con los vaqueros puestos, un Lucky Strike en la boca, una cocacola en la mano, una hamburguesa del McDonalds en la otra y escuchando hip-hop por el Ipod, resulta chungo levantarse ante una bandera. Yo lo entiendo. Conste que a mí, salvo el hiphop este de los huevos, todo lo demás que he enumerado me gusta, aunque, claro, yo no soy antiamericano.

Precisamente el hiphop es lo que me trae a este espinoso tema. Hace un par de noches me ronqué casi entera una peli de Eminem, "Ocho millas", sobre el rapero suburbial y todo este rollo tan gili. Me llamó la atención, durante el cuarto de hora que me mantuve despierto, que los "poetas" del hiphop son como los versolaris vascos o los troveros murcianos, pero en cómo molo. Se juntan a improvisar versos de enorme inspiración del estilo: "Me cago en tu puta madre, jodido hijo de puta, te voy a aniquilar y a cagar luego en tu calavera", que no es fenómeno caníbal, ojo, porque es inconformista, sí, pero sumamente ignorante: no hay existencialismo en no saber nada sobre nada porque anula la capacidad de compromiso. Sin embargo, uno va por cualquier ciudad española y no se puede evitar ver a un José Antonio o a un Felipe Juan disfrazado de negro del Bronx, con cadenas, dibujitos horteras en el pelo, la ropa exageradamente amplia (como Bush), caminando como monos espasmódicos por la calle, con estertores de diarrea letal y moviendo los brazos como si tuvieran un moco pegado en el dedo y no se lo pudieran despegar. Cada uno es libre, pero a mí, me parece ridículo... ¿Ustedes se imaginan en Nueva York a unos negros de Harlem vestidos de huertanos o de vascos, tocando la trikitrisa e improvisando trovas y bebiendo de la bota? ¿No dirían "Estos yanquis son idiotas"? Pues eso, las carencias afectivas.

Les dejo, y ya que he citado los clásicos, cara al fin de seman no olviden que si se supervitaminan demasiado, estarán hechos polvo el domingo y que si se mineralizan mucho, se quedarán de piedra.

X. Bea-Murguía

miércoles, enero 25, 2006

Fumanchuísmo patrio


Hoy amigas hablaremos del denominado fumanchuísmo.El fumanchuísmo es una técnica milenaria basada en una fusión de elementos combinados para lograr que la mejor hembra nos seleccione como macho y todo ello con una absoluta discrección para evitar comentarios de la manada. El fumanchuísmo no es una receta mágica, si Usted, que por lo general se ha tomado 5000 pesetas en whiskies, intenta combinar estas técnicas a las tres de la mañana probablemente reciba comentarios de halago personal: “Qué baboso eres”, halago social: “Eres el típico babas”, halago familiar: “Me cago en tu p...”.Por lo tanto recuerde que: El fumanchuísmo exige sobriedad.

El fumanchuísmo exige del individuo ser un buitre y no tener respeto por ningún otro macho, imaginemos que el Amigo R conoció en su lugar de trabajo a la Señorita M y que ambos quedan en determinado lugar para tomar unos aperitivos, el verdadero maestro del fumanchuísmo aparece en en ese momento misteriosamente, como por arte de magia. Por lo tanto la Primera regla es: Aparece en cualquier sitio misteriosamente o en los lugares más insospechados. Existen individuos que son capaces de aparecer en el extremo de una barra de un bar de 70 m2 lleno hasta las trancas sin que tengamos percepción sensorial alguna de su entrada.

Por supuesto que el fumanchuista nunca te presentará a una mujer, siempre tus amigas serán sus amigas, en este caso la Señorita M verá al Fumanchú de turno y le saludará , primer contacto.El verdadero Fumanchú sabe llevar la conversación a parcelas de su propio interés : “ Mi amigo R ¿es compañero tuyo?, joder en la facultad suspendía todas”, segundo contacto .En el hipotético caso de que R, M y Fumanchú coincidan con un nuevo amigo ,en el ejemplo el nuevo amigo es Z, en el bar de 70 m2 su comentario será “Coño Z, hola, estamos aquí con la Señorita M, R y yo, M te quiero presentar a Z , qué tal en el paro Z?”, tercer contacto. El fumanchuísta por lo tanto aparece en lugares misteriosos y desvirtua a cualquier competidor con el ánimo expreso de conseguir a la hembra, un hijo puta dirán Ustedes, pues bueno es la moda, lo “in”, lo que se lleva.

El fumanchuísta por supuesto tiene la capacidad de lograr: que una mujer se quede sóla a las 4 de la mañana atascada en un ascensor de parking con él como único compañero en tal claustrofóbica aventura, que R y M le acaben acercando a casa y que al final R le preste el coche para comprar tabaco y él lleve a M finalmente a casa.

No obsante el fumanchuísmo presenta una serie de riesgos, el fumanchuísta por lo general acaba sólo porque es incapaz de mantener una relación a largo plazo, su reto, su compromiso, es lograr hembras con frases del estilo “ Antes de conocerte mi vida no tenía sentido”,”Mis amigos son unos borrachos pero yo soy diferente”, en el momento en que la hembra pica el anzuelo y cae rendida ,el auténtico fumanchuísta pierde interés.El fumanchuísta es visto por lo tanto con 48 años en lugares normalmente del extrarradio con nombres como “Galaxia Sound”, “House and Fun” intentando llevarse algo a la boca ,y cuando se va tirando a pellejo ,más valen billetes en la cartera que gracejo.

El fumanchuísta es alguien que Ustedes conocen, compréndanlo, son enfermos mentales con los que tenemos que convivir.

Desde Majadahonda , su amigo Hormon. Sepan que si lo desean pueden visitarme y comer juntos, preferiblemente chicas.

Pequeño cambio de imagen

Haciendo caso a Pepe, hemos pensado que así se facilita la lectura. Las chorradas son las mismas.

La Junta Directiva en consonancia con la gerencia

La imaginación del poder


Queridos amigos,

Ruín Gallardón llena Madrid de cámaras de vigilancia para que a ustedes, gente de bien que paga sus impuestos, no les suceda nada malo. ¿Que usted va a la plaza Mayor a comer saludable caucho entre pan y pan a millón y medio? Gallardón lo verá. ¿Que quiere deleitarse con la magnífica fachada de la Casa de la Panadería? Gallardón lo sabrá. ¿Que usted lo que desea es rascarse los huevos al pie de Felipe III comentando la última victoria del Racing Culebras? Gallardón estará allí... Sé que esta observación ya la he hecho en anteriores entradas, pero lo que no he dicho es que no tengo intención de volver por la plaza Mayor de Madrid (eso que me pierdo), porque prefiero que me roben la cartera. También debo de ser un snob, pero, hagan caso a Hormon Wells y lean a Orwell: este tipo fue un visionario que, si viviera hoy, se podría ganar la vida con una túnica hortera diciendo gilipolleces sobre el futuro de la infanta Leonor en un programa chusco de TV para suegras alienadas. Mal destino para un genio. Quizá me he pasado.
Claro que, ya se sabe, que no hay mal que por bien no venga... ¿Que usted tiene vocación de actor y le atrae el mundo de las bambalinas? Coño, pues vaya a la plaza Mayor disfrazado del Siglo de Oro y recite allí sus letanías, a ver si con un poco de suerte el Gran Hermano de turno es cuñado o primo de José Luis Moreno y le dan un papel en una comedia ligera de "Noche de tiesta"... O le presentan a Mercedes Milá, esa gran profesional. Se puede montar un macrocasting en la Plaza Mayor de Madrid. ¿Que usted es exhibicionista? A huevo para salir en los programas de zapping. ¡Miren! ¡Pues no es mala idea! Desde aquí llamo a la rebelión: todo el que pase por la Plaza Mayor de Madrid, que le haga un calvo al Gran Hermano, que le enseñe el culo a las cámaras de Gallardón. Ojo por ojo.
Amo Madrid con sus defectos. ¡Váyase señor Gallardón, pero... no venga señora Jiménez! ¿Por qué no podemos poner pasta entre todos y contratar, qué se yo, a Bill Gates de alcalde de Madrid? O a Ronaldinho, coño, con lo buen chico que parece, comiendo natillas con su mamá: "Mira, máma, la pelota". Y que se traiga a Eto'o para la cabalgata de Reyes.
Ahora que en Barcelona no lo tienen mejor con Joan Clon, el único alcalde que es una copia de sí mismo criogenizado. Se le ve que es el alma de la fiesta. Sus plenos deben de ser el despiporre... Podrían fichar a Antonio Gasset para moderarlos. Serían ya la pera, un despelote digno de prime time. (Para entender lo de Gasset, relean "De la censura paradigmática filipina")
Todo esto viene porque el gobierno municipal de la Ciudad Condal ha aprobado una ordenanza "de Medidas para fomentar y garantizar la convivencia en el espacio público" por la cual se multa con nada más y nada menos que 3.000 euros (como a ellos se lo regalan, no les parece mucho) una serie de conductas antisociales como la mendicidad, la prostitución, la venta callejera, los grafiteros, los patinadores... Si no han añadido a las estatuas vivientes es porque se parecen al alcalde Clos. En fin. No voy a caer en fácil demagogia... Bueno sí. ¿A un mendigo le van a poner una multa de 3.000 euros? ¿Y si no la paga qué? ¿Le requisarán la prótesis que es de lo que se vale para delinquir? ¿Estamos locos o qué?. Como dice Les Luthiers, van a limpiar las calles de inmundicia, de porquería... de gente.
No quiero decir que algunas de las cosas que se persiguen con tal ordenanza no estén bien. Su intención puede ser buena en algunos aspectos (lean la prensa, yo no me voy a extender más en esto, hoy sólo toca demagogia), pero, de nuevo, no tienen más imaginación que el multazo desproporcionado para amedrentar a la peña. Recuperemos viejos lemas: "La imaginación, al poder", "Zapatero no fumes en el trabajo, que Gallardón te ve", "Ronaldinho for mayor"...
En fin, les dejo que hoy va a publicar su primera encíclica Benedictus XVI, qui venit in nomine Domini, y le tengo que explicar a mi mujer esa parte que habla del matrimonio, el amor y la procreación, porque me parece que ella no lo ha entendido muy bien.

X. Bea-Murguía

martes, enero 24, 2006

Mamá quiero ser artista



Chusma estatutaria:

Lo de la televisión ya no tiene nombre, yo por lo general intento no encender la televisión porque principalmente no me interesa en absoluto que una señora venga del futuro para hablarme de un nuevo producto de limpieza, que anuncien un coche de 50.000 euros con una canción del lumpen proletario negro de los años 60 y por supuesto me repugna ver los partes del Gobierno del signo que sea.

Después de esta charla progre, les comento que ayer sinceramente y previo al interesante reportaje del triángulo de las bermudas de la BBC, cada vez me interesan más los temas esotéricos y asuntos del misterio, pude visionar un progama que me produjo vergüenza ajena, como cuando veo a alguien que lee un libro de Harry Potter, el programa en cuestión se llama “Camino a la fama” y sus productores son gente sin ningún tipo de moral.El programa es el manido “Reality Show” para una supuesta obra de teatro que se estrenará el próximo día 1 de Febrero en el Teatro Calderón, un remake a la Mostoleña de la serie Fama. Pues bien el catálogo de infraseres que aparecen es inaudito, pero lo es más que esos mismos infraseres, y lo digo por pena no por asco, se dejen llevar por apenas 10 minutos de presencia en la pantalla: el leit motiv del programa de ayer era ni más ni menos los momentos anteriores a la selección de candidatos y aquí ya entra lo que considero inmoral, jugar con los sentimientos y expectativas de futuro de la gente y más si se ve a la legua que esa gente es el auténtico target de mercado denominado
“Looser” : esa Puri en ese extrarradio, que conste que ella no tiene la culpa,esperando la llamada para que le digan que sí o que no, con el móvil sin cobertura,ese hombre en paro “long term” que se te caían las lágrimas de ver que conseguía un trabajo, ese chaval que quiere ser estrella y que le dicen que nasti de plasti , ese tufillo gay del director de casting, esa chavala de diez años de conservatorio llorando porque iba a ser protagonista. Muy deprimente la verdad de lo frívolo que era, mi pregunta es: ¿Cómo se puede ser tan hijo de puta y jugar con los sentimientos de la gente?, ¿La gente cómo es tan subnormal de querer que filmen sus miserias?, porque la escena final de uno de los concursantes tomando un plato de jamón, unas cortezas y viendo en vídeo su “casting”era de verdad para llorar de pena.

En fin cada vez vivimos más en 1984, no les recomiendo esta novela porque si lo hago soy un snob, así que sigan leyendo Harry Potter.

De indias y de vaqueros


Queridos amigos,

ustedes son listos y lo saben de sobra: para los niños, como para los políticos, la vida es en blanco y negro (ni siquiera escala de grises), un río que divide en dos un pueblo, en cuyas riberas habitan los opuestos. A esto se le llama maniqueísmo, una corriente cristiana predicada por un heresiarca de ese mismo nombre que creía en dos fuentes de creación: el mal y el bien. Vamos, la tensión entre contrarios como origen de la vida, ¿que el hombre es el bien? Pues la mujer es el... ¡No sabían nada los maniqueos! Cualquier cosa con tal de poder irse a jugar al mus con los amigotes. ¡Eso eran hombres y no lo de ahora! ¿A que sí, Vernia?

Para Maniqueo, como para los niños, no existen los grises, lo que proviene de una visión limitada del mundo causada por falta de madurez intelectual. Quiero decir que no hay que considerarlo un defecto, a no ser que tengas 45 años y vivas en Bruselas (o en Fuenlabrada), que es una concepción simplista de la vida que reduce el inmenso, ancho y diverso día a día a una capacidad de comprensión limitada. Por eso, por más que se empeñen los guionistas de los Lunnis, un niño de cuatro años jamás entenderá la homosexualidad. Personalmente me jode que el maniqueísmo correcto de una panda de gilipollas con moraleja preparada, de moralizantes predicadores sin sotana, se inmiscuya de esa manera tan traicionera en la educación de mi hijo. Si yo quiero convertirlo en un cafre del Atleti (o del Racing Culebras), ¿quién cojones son ellos para mostrar a mi hijo de forma tan rastrera lo que es bueno y lo que es malo según una escala de valores que puede no ser la mía? ¿Por qué se creen ellos que su moral es superior a la mía? En fin, perdonen que me vaya por las ramas, pero que los programas infantiles se metan a resolver problemática adulta me saca de quicio.

Mi hijo, pónganse la gabardina que voy a babear, es mi héroe desde que lo vi salir por el túnel de la vida... Tan pequeño, con los ojitos tan abiertos y los pies tan grandes. Pasó del seno materno a los brazos de su padre, que lo vio nacer, en el día en que cambiaron todas mis prioridades hasta un punto que ni yo mismo era capaz de imaginar en ese feliz minuto de mi existencia. Es mi puto héroe, mi Rodrigo. A los tres años, un día, le dijo mi madre:

-- "Rodrigo, ¿quieres un bocata de jamón para merender?"
-- "Vale, abuela. Un bocata de jamón y una cervecita".

¡No me digan que no se merecía una Heineken bien tirada! Esto, ¿lo habrá aprendido viendo los Lunnis?

Vuelvo al hilo del principio. Ayer, mi hijo jugaba con unos clicks de indios y vaqueros cuando me preguntó quiénes eran los buenos. Una pregunta jodida, más de lo que ustedes piensan. Si me pongo en "Tambores lejanos" y me afeito a cuchillo como Gary Cooper... Y si me pongo en "Bailando con lobos"... Al final resuelves que hay indios buenos y vaqueros malos y tratas de explicarle que pueden ser amiguitos. Sin embargo, todo esfuerzo es vano, amigos, porque el niño lo tiene cristalino:

-- "Los vaqueros son los niños", es decir, los buenos, "y los indios son las niñas", es decir... La cosa es así de rotunda y simple. El mundo se divide en tíos con pistola y tías con pluma y si viene un día a comer a casa Boris Izaguirre, mi hijo le dará un colt cromado del calibre 38, por más que él (y los Lunnis) se empeñe en ponerse las plumas de jefa india. Rodrigo ha aprendido en el cole que los niños tienen pene y las niñas, bulba (así de retorcida es la educación de hoy día que oculta a los ciudadanos y ciudadanas del mañana la realidad transexual) y explicar más es liar la madeja innecesariamente. Ya entenderá él la vida según se vaya haciendo mayor. No hay ninguna prisa.

Después le pregunté por el nombre de su vaquero:

-- "Claro de luna", me dijo y me rompió todos los esquemas.
-- "¡Vaya nombre más indio para un vaquero!"...

Jodidos niños.

X. Bea-Murguía

lunes, enero 23, 2006

Están aquí y viven entre nosotros


Papichulos:

En el momento de viajar uno tiene prejuicios del estilo: ¿Me atracarán en Freetown International Airport o será ya una vez entrado en la Selva?, ¿Estoy preparado para un potencial gonococo?, ¿Sortearé los peligros de la salmonella comiendo ensaladilla rusa en pleno mes de Agosto? .El pasado viernes me planteaba algo aún más raro en un avión de SN Brussels : ¿Cómo es Bruselas?, la verdad que por referencias de todos esos Willie Fogs que conozco, esos intrépidos amigos que viajan tanto, esos Marco Polos de edreams Bruselas no estaba dentro de los destinos “Must” de mi preferencia ,los destinos “Must” son aquellos destinos que aparecen en un suplemento de viajes de El País y que se ponen de moda, que aparece en El Pais que Bolivia es un país interesentasímo pues se convierte en un “Must” , que se recomienda visitar Liberia en plena guerra civil, pues allá que voy con lo que te doy.

Bruselas puede que sea la ciudad más cosmopolita del mundo y curiosamente añado que ESTÁN AQUÍ Y VIVEN ENTRE NOSOTROS. Para explicar esta aseveración vayamos por partes como dijo Jack el destripador.Bruselas , cómo no han caído esos coolhunters de gafas de pasta por el amor de Dios, concentra un gran número de funcionarios de los distintos organismos de la Unión Europea, imaginen miles de personas de todos los estados de la Unión, ya no sé cuántos son , sería interesante hacer un estudio comparativo con Londres o con el mismísimo Niu Yol , porque a mi me suena que estas dos últimas ciudades concentran en porcentaje lo típico : Pakistanís alfombreros, Puerto Riqueños papichulos como Ustedes y POVNIS varios (Panchitos volantes no idetificados), en fin sin dudar del cosmopolitismo de ellas creo que Bruselas debe ser la más cosmopolita de las ciudades del mundo.

Por otro lado ESTÁN AQUÍ Y VIVEN ENTRE NOSOTROS.El Belga auténtico, el nacido allí, es un Marciano del 8 y medio, la invasión posiblemente se ha llevado a cabo en los últimos años y creo que Solana ese Señor que de su enemigo ha hecho su medio de vida está en conexión con los seres del espacio exterior. Indicios: Gente que a las seis de la tarde desaparece de las calles implica posible necesidad de completar dieta en algún extraño artefacto, las no conversaciones en cafés y lugares de asueto implican conexiones telepáticas de inteligencias diferentes a la nuestra.Que a las 3 de la mañana en el garito de moda “Café Belga” con música electrónica nadie baile y nadie hable da bastante mal rollo, que sonrían a un ser como Alberto “Murga” Fernández implica costumbres no humanas,que un taxista te diga que no se puede beber coca-cola en un taxi cuando ya te has tomado la lata y contestes “trés bien” implica retraso emocional no humano.Que un Frikie de Chile no tenga amigos en toda la ciudad es ya motivo suficiente.

Bruselas señores por otra parte es una ciudad curiosa, arquitectura de todos los estilos “Noveau”, “Decó”, “Racionalista” e incluso motivos masónicos en el jardín en frente del palacio del Rey,algo que me emociona , una pena que hayamos estado apenas 2 días y no pudieramos verlo tranquilamente todo, por supuesto esto no lo hubiera descubierto sin la ayuda de Clara de la Torre que ha demostrado una paciencia sin límites con Los Malditos Mojarras al completo.Bruselas además es el lugar dónde uno de nuestros componentes ha encontrado al amor de su vida y no ha podido ni siquiera dormir pensando en que composición de “Richard Clayderman” será de más agrado para ella. Más de un suspiro y mirada mohína se dejaban caer entre cafés y cervezas. Se lo merece porque es un chico muy guapo.

¡Despeja, Tarzán!


Queridos amigos,

El sábado me estrené de defensa central en el Racing Culebras, la “Mandarina mecánica”, más que nada porque mi estado de forma tampoco me permite, de momento, grandes carreras por la banda ni alegrías ni mariconadas por el estilo. Estuve un rato arriba, pero a la décima patada recibida, y después de marcar un golazo con la espinilla y de rebote, me retiré a mis cuarteles de invierno, en el centro de la defensa.

Ustedes se lo perdieron por no venir a animar al Racing Culebras, su equipo y el nuestro: ¡Qué porte! ¡Qué trote cochinero por las inmediaciones del área! ¡Era para sacarme en el "As"! Me vi, de pronto, substanciado en un Fernando Hierro, pero listo; en un Koeman con cintura; en un Cholo Simeone sin navaja; en un Tarzán Migueli sin bigote... Con seguridad, tajante, dando órdenes a mis compañeros, contemporizando, despejando el peligro... Fiel a mi función, marco al 21 suyo por detrás, cuando veo que viene hacia mí un balón alto... Muy alto... Muy, muy alto... y yo, firme, en mi papel, pienso: con la cabeza, Tarzán... Y la bola que baja hacia mí... ¡Despeja con la cabeza, Tarzán!... Y baja, baja, baja... ¡DESPEJA TARZÁN!...

Tengo un aplastamiento de vértebras cervicales que me tiene más tieso que el recluta José Ramón Carrillo en la mili cuando le dijo su sargento: “Tú, con ese apellido, lo vas a pasar mal aquí”. Menos mal que mi señora me da friegas y refriegas en el cuello (Mamá, que estoy bien, que el blog no es la vida real). Por cierto que el domingo fuimos al monte con unos amigos y no se imaginan ustedes el sufrimiento inhumano que se padece al intentar beber vino de la bota con dolor en las cervicales o al tratar de diferenciar entre pinos albares y negrales y estas cosas que hacemos los amantes de la naturaleza.

En el momento del despeje sentí un pequeño mareo y el dolor fue inmediato e intenso. Pensé que, con semejante testarazo, habría mandado seguramente el balón al segundo anfiteatro. En mi delirio, no descarté la posibilidad de que, desde mi área, con la potencia impelida al esférico, pudiera, en un fallo catastrófico de su portero, marcar mi segundo gol del día, pero resultó que no, que el pelotazo me incrustó la cabeza en el cuerpo como a un dibujo animado, me transformó en un bandoneón al puro estilo de la Pantera Rosa y la bola quedó muerta para que el 21 suyo chutara... Falló, que conste, que no fue tan grave.

Sé que muchos creerán que lo que voy a decir ahora, que es el pensamiento que me sobrevino mientras conducía dolorido a los brazos de mi mujer, es un poco duro, pero, amigos, la aprensión es así. Pensé en sección de médula a la altura del cuello, mientras recordaba, una y otra vez, paranoico, el balón cayendo de las alturas como un castigo, como un martillo de infieles. Al igual que el tipo de la novela de Paul Auster (aquel que da un giro a su vida tras salvarse, por centímetros, de ser aplastado por una viga) yo me lo he replanteado todo: que le den morcilla a Tarzán Migueli... A la que vea que me viene el balón con cara de mala leche, yo me aparto como Michel en el Mundial de Italia.

X. Bea-Murguía

sábado, enero 21, 2006

Canibalismo


Queridos amigos,

Tuve la fortuna de compartir mantel, el pasado miércoles, entre otros, con mi amigo Rafael Reig, filólogo, escritor y profesor, que está a punto de sacar al mercado su propia historia de la literatura.

-- “¿Cómo es, Rafael?”.
-- “Pues como una historia de la literatura al uso, pero con diez whiskies”, me dijo.

La cosa promete, más cuando hizo hincapié en el carácter caníbal de la literatura, según él, porque las generaciones nuevas van devorando lo establecido, como Saturno devora a sus hijos. Podría estar de acuerdo con él al cien por cien, aunque cuando el profesor habla lo mío es callarme, si no fuera porque el panorama de las letras actual es purititamente intragable. Ojalá viniera alguien a proponer algo nuevo y se comiera a los divos superventas, pero mucho me temo que ese hueso es muy duro de roer.

Sin embargo, hace unos años, y por eso me alegró que Rafael dijera “caníbal”, se produjo un nuevo movimiento joven y con ganas de romper. Cada generación tiene su revolución, pero la nuestra está pendiente, amigos, porque nos la dieron hecha. Una generación nueva que hereda un orden de sus padres, se lo come y lo caga, lo acomoda a una nueva visión del mundo, pero nosotros somos tan camaleones que, simplemente, nos hemos adaptado. No quiero decir con esto que haya que salir a la calle a quemar coches ni nada de esto. No, no. La mayor parte de los quemacoches de Francia no tenía ni puta idea de por qué lo hacía. Precisamente, eso era lo divertido: ver a todos los sesudos intelectuales franchutes dando su opinión sobre una revuelta que no eran capaces de entender “¿por qué lo hacen si les hemos puesto un piso?”. En mi opinión fue un fenómeno caníbal, sumamente borrego, pero caníbal.

¿Qué es la literatura caníbal? “Trainspotting” de Welsh: la cruda realidad protagonizada por personas que provocan en el lector asco e incomprensión, porque se dejan llevar por la trama hacia un final previsible y trágico, un canto a la autodestrucción, una revisión del existencialismo cuya máxima expresión es “El extranjero” de Camus, un no taxativo al final feliz comercial. En España, “Las historias del Kronen”, de José Ángel Mañas, es un buen ejemplo de literatura caníbal (y de pésima adaptación al cine). Lo cierto es que te pasas todo el libro pensando en que el protagonista es un pijo, un gilipollas y un hijo de puta, pero conoces tanta gente de ese perfil entre los de tu generación...

Me gusta Camus, me gusta la literatura caníbal que fagocita el último movimiento literario y filosófico que ha valido la pena, el existencialismo, convirtiéndolo, mutando al bizco de Sartre en un fenómeno urbano, cruel, desgarrador y, sobre todo, sin esperanza, en el puto infierno “A puerta cerrada”. El ser humano entregado a su destino irremediable. El tiempo nos come, amigos y amigas, devoren a sus padres antes de que Saturno se los meriende... En sentido figurado, claro...

Entonces me levanté, con el candelabro en la mano y me lancé sobre él. Cuando lo tuve en el suelo, le machaqué la cabeza a golpes, llamándole hijo de puta todo el rato, sin atender a las risas de Juan, que seguía siendo el abominable hombre de las nieves. No paré de golpearle la cabeza ni aún cuando vi que se la había abierto y que ya estaba palmera.
Lo dejé tan mal que ni sus padres –si supiera quienes son- lo reconocerían aunque quisieran y me fui a por Juan. No había dejado de reír desde que había llegado a su casa y ya estaba hasta las pelotas de esa risita de hiena. Lo agarré de los pelos y le pegué un rodillazo en la tocha. Creo que se la rompí, porque cayó una torrentera de sangre, pero no dejó de descojonarse de risa. Así que, según lo tenía sujeto por la melena, lo arrastré hasta la mesita -que era de estas que tienen un cajón y dentro se ponen adornos- y rompí el cristal con su cara.
-- “
¡Sigue riendo, escoria!”.
Y seguía riendo el muy cabrón y cada vez me sacaba más de mis casillas y yo no podía parar de tocar el tambor con su cara, sobre los cristales rotos de la mesa.
-- “
¡Esnífate esto si puedes, capullo! ¡Vamos! ¡Esnifa, cabrón, que es perico del bueno!”.
Debí de clavarle cristalitos hasta en los conos y en los bastones y continué un buen rato a golpes con su cara, hasta que me cargué también la madera. Entonces su cabeza quedó encajada entre las astillas y no fui capaz de sacársela, por más que tiré de ella para pegarle más: ya no le daría más pasta al camello de turno
”.

X. Bea-Murguía

viernes, enero 20, 2006

Pierden los papeles



Queridos amigos:

Nada más lejos de mi intención que hablar aquí de política (lagarto, lagarto), pero no quiero dejar pasar la oportunidad de opinar sobre el asunto de los papeles de Salamanca. Con tanto bullicio, a mi juicio, los que más pierden son los propios papeles, que van, vienen, se agitan como el libro rojo de Mao pero siguen sin leerse y ya se sabe el destino que espera a un papel que no se lee: envolver pescado.

Se une este tema con la magnífica entrada anterior de Hormon Wells, “Picasso, un fraude en toda regla” (corran a leerla) en el sentido de que, en el fondo, con la gaita de los legajos del archivo de la Guerra Civil estamos dando un espectáculo dantesco, digno del aldeanismo provinciano más lerdo, cateto a babor (¡Alfredo Landa, mi héroe!) y a estribor. En una España, ¡coño!, moderna y globalizada, unos y otros se pelean por unos papeles, como si estuvieran cagando en el campo y no tuvieran qué echarse al boquete. Y, digo yo ¿qué más dará dónde estén los papeles si nadie los consulta? De nuevo, el icono no nos deja ver la realidad (de verdad, Punko que me ha encantado lo que has escrito).

La mayor parte de los que van a abuchear el despapele y de los que van a recibirlos como en “Bienvenido Mr. Marshal” no sabe qué se dice en esos papeles, no los va a consultar en su vida, no conocía de su existencia antes de todo este lío y no tiene ni idea de si pertenecen a la Generalitat de Cataluña o a la Particularidad de Salamanca. Es más, amigos y amigas, la mayoría sólo sabe escribir SMS llenos de faltas de ortografía al 5555 del programa “Sal so zorra” y al resto, conformado por víctimas del relativismo en boga, se la pela profundamente lo que ahí se diga. ¿Nos hemos vuelto locos o qué? Los papeles de Salamanca son un icono de la estulticia localista tipo "¡Que vi, que vi, que viva mi pueblo!" y "¡Donde esté la tortilla de patata que se quite todo lo demás, coño!". Se puede ser más ciego, más obtuso, más ignavo y más melón, pero sólo si te llamas Snopes, vives en el condado de Yoknapatawpha y votas a Bush porque crees en la libertad (votar a Bush por otros motivos, como, por ejemplo, por creerle capaz de leer entero “La cabrita feliz” y captar el mensaje, me parece coherente).

A nadie le importa lo que se dice en esos papeles. Es una cuestión de icono, de identificación con una formación política u otra: de nuevo, comportamiento borrego.

Disfrutando esta mañana del pedazo de atasco, mientras me cagaba en... No lo digo porque después de hora y media de embotellamiento tardaría menos en contaros a quién NO he maldecido... (digo yo que por qué Gallardón ve tan necesario machacar el presente de los madrileños para construir el Madrid de un futuro que nunca llega). Eso, que iba yo escuchando en mi filípica mañanera, con la que me informo como periodista que soy y ejerzo, a cuatro prohombres que hacían pajaritas de papel con la actualidad cuando al ir a subir el volumen de la radio, me he equivocado de botón y, de pronto, como una llamada al relajo en el atasco, como una salvación, el “Let it bleed” de los Rolling ha llenado el vacío solitario de mi cubículo, apaciguando mi turbulento estado de ánimo. Nada como los Rolling Stones para no perder los papeles. Me he investido en Jagger y he cantado a gritos: “We all need someone we go cream on”... La del coche de al lado me miraba raro, pero yo seguía: “You can cream all over me”. ¿Qué nos quieres decir con esto, Mick?

X. Bea-Murguía

jueves, enero 19, 2006

Picasso, un fraude en toda regla


Chusma bohemia:


La deconstrucción del arte supone eliminar cualquier tipo de contexto para una evaluación fiel de la obra artística. Como sé que muchos de ustedes son unos ceporros que entienden únicamente frases simples: “Quiero un Jhonny Walker”, “A las cinco salimos para Benicarló” les explicaré ilustrativamente el significado último de la frase.

Usted un buen día queda con el típico amigo de chaqueta de pana y se toma unos vinos en el Automático en la calle Argumosa, justo antes del atraco a punta de pistola en un entorno tan multiculti y mientras saborea un caldo ora Rioja ora Ribera del Duero ora Don Simón pero embotellado como si fuera un Rubén Bilbao, su amigo espeta la frase: “Picasso, últimamente he descubierto a Picasso y realmente me llega”. Porque Usted es discreto o discreta no responde la siguiente frase: “El de Málaga es un fraude, es más me parece una puta mierda”, sino que emite un “Picasso ah sí, claro” sobrio como si fuera de Segovia.

En definitiva con esta última contestación Usted no se ha liberado del prejuicio de contextualización del Arte: Usted contextualiza a Picasso como un artista con una denotación dentro de las críticas realizadas por especialistas en Vanguardias, Vanguardias que ya tienen por cierto 100 añitos o más.Más sencillo, si Usted tuviera que escribir una redacción sobre Picasso en el cole diría algo como: “Picasso el pintor malageño reconocido como creador del cubismo.....con su cuadro Las señoritas de Avignon...”.Es decir ,Usted ,mendrugo,califica a un artista por referentes:contextos.Un contexto también puede ser una moda, una opinión televisiva, la opinión de un grupo de profesionales... .Su criterio por lo tanto es válido en cuanto a repetición: digo lo que dicen las autoridades en la materia al respecto.

Si eliminamos los contextos, nos paramos a ver el cuadro de Las Señoritas de Avignon en frío ¿Qué vemos? , ¿Cuál es nuestra visión subjetiva y por lo tanto de criterio sin referente? , pues una verdadera estafa, un verdadero fraude, una mierda sería mi definición subjetiva y aquí ya se monta el Chicken with the people porque seguramente se acusará al individuo de inculto, de ignorante, de retrógado, pues no chusma no,hace falta ser un poquito más iconoclasta y cualquier obra de arte o artista interpretarla sin ningún tipo de complejo de cara a la galería que por otro lado en numerosas ocasiones muestra un borregismo estándar.

Para disfrutar más del fraude:

http://cv.uoc.es/moduls/XW01_04045_00736/

Peticiones de los oyentes

Queridos amigos,

se cuentan por millones los correos electrónicos que nos habéis mandado en este primer mes de blogueo constante, haciéndonos diversas peticiones por lo que hoy he pensado que, quizá, podría dar satisfacción a alguno de ustedes. Por ejemplo, Mari Carmen, de Tomelloso, Ciudad Real, nos manda unas preciosas fotos. Muchas gracias, Mari Carmen, son muy bonitas. Hay una en concreto, esa en la que sales con tu gatito, que no sabemos si la estamos interpretando bien. Tal vez nos puedas mandar un correo para explicárnosla. Perdona que no la cuelgue aquí en el blog. No quiero herir el sentimiento de los amantes de los animales... Quiero decir, de los aficionados a los... Bueno, los de aquellos a los que les gustan los gatos pero ni para comer ni para... Tú sales muy guapa, de verdad, se nota que es todo natural, nada de cirugía. Estoy de acuerdo contigo en que hay que reivindicar los productos de la naturaleza y aceptar los años tal y como vienen, pero, si admites un consejo de un amigo, seguro que estarás mucho mejor con un maquillaje más leve... Algo que te haga... ¿Invisible?

También quisiera pedir disculpas a Jesús Mari, de Bilbao, Laos, Euskadi, que se ha sentido ofendido por lo que he escrito recientemente sobre Torrebruno. Nos dice que él ha crecido con este entrañable personaje (por lo que probablemente no habrá pasado del metro y medio) y que no comprende ni comparte la crítica que se ha vertido aquí contra su lema "Lo importante es participar y todo eso..." Querido Jesús Mari, discúlpame, prometo no volver a retorcer de ahora en adelante aquello de que la belleza está en el interior, principal legado filosófico de Walt Disney, cuya mujer era, a buen seguro, más fea que pegar a un padre. Me autoimpongo, de penitencia, tragarme una temporada completa de cualquier teleserie americana, tipo we're a happy family, me, mom, daddy, con insistencia en la parte de la moralina, cuando suena el himno, y el padre coge a su hijo por banda y le mete el rollo de la verdad, la libertad y los derechos de propiedad. God bless America.

Dd Valencia, el Josua n qenta q no entiende na d l q scribimos en algunas entradas. Es normal, mi querido Josua, está en castellano, pero tú no te preocupes. Sigue esforzándote.

Otro fan de Wells & Bea-Murguía, que asegura llamarse Benedicto, nos pregunta que qué pensamos del relativismo (la palabra de moda). En este punto, me gustaría ser claro y conciso: a mí, personalmente, me la pela.

También he seleccionado una petición de Nuria Esther, de Tres Cantos, Madrid, que me obliga a hacer algo que aquí no me gusta que es escribir en serio, porque no quisiera que ustedes entraran en el blog como quien pone la radio y escucha al de la filípica de turno. Una amiga, Isabel, a la que desde aquí mando ánimos, está sufriendo cierto acoso laboral en el trabajo. Yo no me voy a unir a la manada de ojos huecos que clama, llora, se arranca el pelo y se rasga las vestiduras por estas cosas. Mi mujer y yo hemos sufrido un hecho de esta naturaleza, por parte de jefas que, indudablemente, no tenían madre o eran expósitas o, simplemente, las cagó la cigüeña que iba de París a Doñana. Me parece una situación dramática y de fácil demagogia barata politiquera y me gustaría que alguien hiciera algo por arreglar este que es un problema real (y no, con perdón, los matrimonios homosexuales... Que sí, que muy guay, estupendo, pero, en fin, no era tan urgente ni necesario como electoralmente rentable).

Nuestros políticos están más preocupados por la manera de llamar a las cosas y por la paridad de género en los consejos de administración de las empresas que por la incompatibilidad de hecho que existe hoy, en nuestro moderno país europedo, entre ser madre y trabajar. Aunque casi mejor que no lo toquen, porque si van a ponerse a educar a la peña por vía del decreto y tente tieso, haremos de la torta una prohibición, quedaremos bien, castigaremos a los malos y, de nuevo, sonará el himno, la libertad, la verdad y God bless Spain, pussy, pero el problema seguirá sin resolverse. ¿Que cuál es el problema? Que a una mujer, por haber sido madre recientemente, por considerar que es mejor para sus hijos cogerse un tiempo sin sueldo después de los cuatro raquíticos meses de permiso de maternidad, su empresa le usurpe su cargo ganado con su esfuerzo y buen hacer de años, la degrade, la coloque en los peores puestos para obligarla a marcharse.

Esta clase de problemas se resuelven con MEDIDAS POSITIVAS, incentivando aquellos comportamientos buenos y sociables, premiando las iniciativas que tiendan a la igualdad de sexos como alargar permisos de maternidad y hacer que no sean tremendamente costosos para las empresas; hacer campaña explicando las bondades de que sean compartidos por hombres y mujeres; dar ventajas a las empresas para que acepten horarios compatibles con la lactancia y la infancia de los hijos (que estamos creando una generación de mendrugos desatendidos)... Seguro que a ustedes se les ocurren más cosas, pero, vamos, es lo que se hace en Europa, ese continente que no se nos cae de la boca cuando interesa. Para que la gente se comporte bien, en mi opinión, tiene que llegar a la conclusión de que es mejor y más rentable. Ya sabemos que lo fácil es dividir el mundo en negros y blancos, ese maniqueísmo tan idiota que se estila en nuestra clase política, pero eso, más allá de dejarnos claro quién es el malo de la historia, no resuelve mucho.

En fin, acabo con José Luis, desde Madrid, que me dice que si yo creo que será bueno, para conciliar mejor la vida laboral con la familiar, acabar con la siesta por ley orgánica. Jose, deje de fumar... lo que sea que fume.

X. Bea-Murguía

miércoles, enero 18, 2006

La mandarina mecánica (Aprensión II)

Queridos amigos,


ya dije que no fiaba mucho del diagnóstico de la doctora (mencionado en la entrada "Hipocondria no, aprensión sí") que aseguró que lo mío era un desgarro (se refería al pecho, aclaro) y que yo he seguido con mi aprensión, como dice el tango "en mis noches, tan tristes y frías, las horas son largas no puedo dormir", temiendo, en el momento de acostarme, que aquélla fuera mi última mirada, que esa noche dormía para no despertar, que moría infartado... Pensaba en Quevedo, "Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra que me llevare el blanco día"... Y en Ricardo Reis,
"A nada imploran tus manos ya cosas,
ni convencen tus labios ya parados,
en el ahogo subterráneo
de la húmeda impuesta tierra".

Y en Lorca: "Mientras la gente busca silencios de almohada, /// tú lates para siempre definida en tu anillo".

Y en Alejandro Sanz: "Laralalá partío no es lo mimmo"... Poetas de lo cotidiano...

No sé si saben que a los culturetas, cuando somos aprensivos, nos da por la lírica en el momento de la trascendencia, apoyada la cabeza con levedad sobre la almohada, como queriendo simbolizar la fragilidad de la existencia y el reto del hombre racional frente al mito del Más Allá, como la impresionante llama de la "Magdalena Penitente" de George de la Tour... (Museo Metropolitano de Nueva York, no se lo pierdan). Ya les dije que la aprensión tiene que ver con el rollo místico más que con el pharmashow de la hipocondria.

Finalmente, lo mío son gases. Sólo gases.

Ríanse lo que quieran de mi pequeño mal (y ojalá les pase a ustedes por reírse), que aunque mi infarto sean pedos mal tirados, yo he sufrido lo indecible. Me reconocerán, al menos, que en una cosa estaba en lo cierto: la doctora falló en su diagnóstico. El acierto pleno se lo debo a Lucía Yunquera que el domingo me dijo con conmiseración: "Lo tuyo son gases, bonito", y me planificó el régimen sin necesidad de electrocardiograma. Así que estoy medio a dieta, digamos. Nada severo, simplemente evito comer entre horas (en mi caso era entre minutos) y vigilo con un poco más de atención la ingesta de alimentos flatulentos.

En el fondo me viene bien, porque reconozco que estoy un poquito pasado de peso, digámoslo todo, ya que la entrada de hoy va de examen de conciencia, de reconocimiento de culpa, acto de contricción y propósito de enmienda. Para este fin "sólo la verdad me vale", como dice Gide en sus memorias (y madrecita las cosas que cuenta ¡vaya catarsis!).

Así que nada: vigilo lo que como y hago un poco más de ejercicio como buen propósito para 2006 (el squash de los miércoles no es un invento). Lo de salir a correr todas las noches se me hace un poco cuesta arriba (sobre todo la vuelta) y me da un poco de miedo la posibilidad de ser secuestrado por una banda de amazonas desbocadas, así que me he decidido a aceptar una oferta para unirme a un equipo de fútbol siete, junto con otras cuantas viejas glorias. Como no sé exactamente el nombre del combinado, yo lo llamo "Los 700 kilos", cifra que no se refiere a lo que han pagado por mi fichaje (me temo que tengo que pagar yo 20 euros), sino a que somos verdaderamente un equipo heavy. Hay que decir que quien lleva el peso del equipo es Miguel Guerrero (nada que ver con Julen), quien el sábado fue amonestado por el árbitro porque "no se vale" comerse al contrario. Digamos que Miguel lleva, aproximadamente, la mitad del peso del equipo.

Vestimos camiseta naranja y pantalón blanco y mi estreno ha sido tan glorioso que ya nos conocen como "La mandarina mecánica", por el fino engranaje de nuestro sistema de juego y tal y cual pascual... Ya saben. Periodistas deportivos: cuando te va bien, "¡España campeón, Clemente selección!" y cuando pierdes dos partidos, "CRISIS". Hay que decir que los consejos técnicos de Punko desde el banquillo fueron definitivos.

¿El resultado? No tiene trascendencia, ya lo decía Torrebruno: lo importante es participar y divertirse (¡vaya chorrada de frase¡ El día que el gobierno se dé cuenta del mal que hizo este hombre a toda una generación de españoles...)

Perdimos 13-0... En fin. Teníamos algunas bajas sensibles... Gonzalo Medina... Un portero con brazos... Quizá haya que cesar a Punko en la consejería técnica... Habrá que ir pensando en fichar a Manolo Miner que, por lo menos, asuste al contrario.

X. Bea-Murguía

martes, enero 17, 2006

Una conspiración desmontada


Chusma intrigante:

Si Usted desea profundizar sobre algún tema histórico tiene la opción de contemplar cualquier reportaje de la BBC, yo lo considero un paradigma del periodismo de investigación, contrastado y serio, nada del periodismo de investigación cutre con micro cámara visitando lupanares de la carretera de Burgos.Un ejemplo del “savoir faire” de la BBC es el reportaje sobre el asesinato de JFK en el año 63, que cualquier joven de extrarradio calificaría como divertacular.Durante el reportaje se puede visionar una animación informática de hace quince años referente al asesinato de Kennedy que cualquier frikie desearía en la Play Station.Un individuo cuyas señas son el haber trabajado duante un montón de años en la animación ,tanto que cuando acabó de realizarla el Commodore ya no se llevaba, nos mantiene en vilo mostrando fotograma a fotograma de tan morboso incidente, Kennedy en el fotograma 234 saludando a la basura blanca allí congregada, Kennedy en el fotograma 246 llevándose las manos a la garganta,Kennedy con un balazo del 8 , 245 la mujer saltando a la parte posterior del coche,246 el cristo posterior de basura blanca corriendo sin sentido y emitiendo “Oh My God” ¿Sólo saben decir esta frase?.¿Están aquí? .¿ Ya han llegado?¿Marcianos? .

El reportaje es digno de mención por el retrato psiquíco del asesino, el tal Oswald, un looser en toda regla en el que incide el relato: su madre no le quiere, su padre era un looser, no tiene trabajo, se mete al ejército, se escapa a Rusia, vuelve con delirios de grandeza y acaba (es la tesis del reportaje) matando a JFK.Lo curioso es cómo los yankees sienten vergüenza por una posible conspiración: ¿Pacto con people from outer space?,¿Castro?,¿los rusos? , cualquier motivo es despreciado, el asesino fue Oswald y punto pelota. A menudo que se desmontan las tesis aparecen tipos de la américa profunda del tipo irlandés gordo y seboso que trabajó como Sheriff, el rabino de turno, el vecino cotilla, el que estaba a cien kilómetros del suceso pero que se lo contaron, una jungla de auténtica chusma increíble que plantea preguntas del estilo ¿Es esta la primera nación o la galería 13 de Carabanchel revisitada?

Como cúspide del reportaje aparece un tal Jack Ruby, el asesino de Oswald “On Air” del cual tenemos otro retrato psicológico: Regente de un local de desnudismo, fan de JFK y con contactos en los bajos fondos que en un arranque megalómano acaba con Oswald.
El pifostio está asegurado y entonces llega el máximo, gracias BBC que me iluminas, con la reflexión un tipejo que trabajaba en no sé que sitio. Al loro con la reflexion de un viejo chocho de Dallas: “Si Ruby mató a Oswald, entonces algún tipo tenía que matar a Ruby porque Ruby sabía por qué lo había matado, y ese tipo tendría a su vez que ser asesinado porque sabía lo que Ruby y Oswald ocultaban, it´s a nonsense”. Con este tipo de reflexiones a altas horas de la noche uno se plantea si tirarse a la vía del metro o a la taquillera y reflexiona aún más sobre el tipo de chusma que vive en Dallas, yo desde luego a mis hijas nunca les dejaría ir allí.

Ni que decir tiene que al Señor Oliver Stone le desmontan ese coñazo de película de 4 horas que es JFK.

Un reportaje 10, sí señor.

La encuesta de enero


Queridos amigos,

quédense con esta sentencia: hoy nos rigen las encuestas. Dios me libre de meterme con esta ciencia que hace creíble la inexactitud, de este barómetro de lo social que acepta el error como posible (ya podrían hacer el mismo ejercicio de humildad la medicina, la quiromancia y la vitolfilia), pero el uso que se hace de sus resultados es de risa. Se puede aplicar a las encuestas lo que se decía de la droga, que es muy buena, que lo malo son los yonquis.

Una encuesta y su estadística jamás pueden demostrar una relación causa-efecto, sino tendencia, proclividad, frecuencia, pero, a menudo, son usadas como instrumento comercial o como medio de influencia, gracias al eco de la prensa (¡esos malditos pájaros del Estínfalo!), con la pretensión de ser prueba de una relación etiológica entre el sujeto origen y el fenómeno estudio. Si preguntáramos en la calle, por ejemplo, por el descubridor de América, el resultado sería: Cristóbal Colón, 60%; Eric el Rojo, 30%; Astérix y Obélix, 5%; George W. Bush, 3%; comodín del público, 1%; NS/NC, 1%. Un sociólogo diría que el 10% de la población es iletrada (y el 3%, idiota); un médico que Colón tiene el doble de posibilidades de haber descubierto América que Eric el Rojo y veinte veces más que Bush, pero un político diría: "nosotros estamos a favor de Colón como descubridor de América y las encuestas así nos lo demuestran".

¿Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que ya que el 100% de los que nacen, mueren, el nacimiento es la primera causa de muerte? No me tachen de retorcido, por favor, al menos háganlo de uno en uno, pero este es el uso que se da normalmente a las encuestas. Diga su fin, que siempre habrá una empresa que le monte un sondeo. ¿Que usted es un multinacional de la belleza y quiere empezar a explotar el mercado masculino para someter a los hombres a la misma esclavitud cosmética autoimpuesta por las mujeres? Me saca al Beckham en liguero (eso no es de homosexuales, sino de modernos) y pregunta en la calle a los hombres: usted prefiere: a) embadurnarse cada noche con crema facial con lipopollas; b) que le muerda un perro los cojones; c) pasar una noche atado a la cama con Marujita Díaz en la habitación; d) que el encuestador le meta un puño por el culo... Siempre habrá un gerontófilo que prefiera la c (o un encuestófilo que la d), pero con esta ciencia hecha la pregunta-dicha la respuesta me temo que el resultado será que el hombre actual se pone crema para dormir.

Además, las encuestas no tienen en consideración la predisposición del encuestado, que siempre tratará de quedar bien con sus respuestas. Si, sigamos con casos hipotéticos, se pregunta a la gente si cede su sitio en el metro a las personas mayores, embarazadas e impedidos, ¿alguien duda de que el resultado será aplastante? Pero luego sabemos que eso no es verdad. Si, encima, la tía que te hace las preguntas está buena, no digo nada.

-- "Según la estadística, los hombres con el pene más largo son de procedencia almogávar y los que tiene más potencia sexual, tienen raíces árabes. ¿Cómo se llama usted?
-- Alibabá Benicarló".

Sin duda, las estadísticas más alarmante son las que usa la ciencia médica: la epidemiología. Ante la imposibilidad de demostrar el origen de ciertas enfermedades, el epidemiólogo estudia los hábitos de las personas para buscar, en ellos, una causa. El problema es que el universo es infinito y las estrellas incontables y por eso, por muy seria que sea la epidemiología, jamás encontrará causa-efecto, sólo frecuencia y proclividad, insisto. Estos datos en manos indeseables, con el debido eco mediático, pueden alcanzar niveles de surrealismo dignos de Buñuel en "El discreto encanto de la burguesía". Y cuando, encima, se elevan los resultados a verdad irrefutable y va de boca en boca como la nueva religión, pasa como cuando los curas decían que el onanismo dejaba ciego. A ver quién es el Satanás que lo niega.

Con la confianza en que, con el tiempo, las grandes verdades de hoy caerán en el futuro por sus pequeñas mentiras, como los grandes diques ceden por diminutas grietas en su estructura, les dejo por hoy con estas alarmantes estadísticas que me llegan del otro lado del Atlántico (lo entrecomillo porque no es mío, aunque comparto su espíritu):

"Número de médicos en EEUU: 700.000.
Muertes al año por negligencia médica: 120.000.
Media de muertos por médico: 0’171
(Fuente: Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos).

Número de propietarios de armas de fuego en EEUU: 80 millones.

Muertes al año por accidentes causados por propietarios de armas de fuego: 1.500
Media de muertos por cada propietario de armas de fuego: 0’0000188
(Fuente: Benton County News Tribune, 17 de noviembre de 1999).

Conclusión:
Estadísticamente, los médicos son aproximadamente 9.000 veces más peligrosos que los propietarios de armas de fuego. Recuerde que no todo el mundo tiene una pistola pero todo el mundo tiene al menos un doctor. Alerte a sus amigos de esta amenaza alarmante. Debemos prohibir los médicos antes de que las cosas se nos vayan de las manos".

X. Bea-Murguía

lunes, enero 16, 2006

Happy Mondays


El día más asqueroso de la semana sin lugar a dudas es el Lunes, si contemplan los caretos de la gentuza enlatada en cualquier medio de transporte bien sea un Seat Ritmo o un Porsche último modelo, o una Línea 7 de metro a hora punta dirección Avenida de América o un autobús, parecen responder más bien a la asistencia a un sepelio que a un trabajo.

La gente está en la cama después de un Domingo agotador con la suegra, viendo como su equipo de furbo pierde, habiendo disfrutado de unas cañas o una barbacoa en Guadalajara porque se es aficionado y se controlan las barbacoas y entonces suena el despertador y se entra en una dimensión diferente, todo parece más lento, uno se mira en el espejo y se plantea transmutarse en un Ronaldo o en un Bisbal (ellos) o en una Lady Di o una Jennifer López (ellas).Veinticinco minutos después ( hay gente que menos porque no se ducha, algo normal en el resto de Europa por otro lado) uno está con esa cara que les comento que supone una mezcla de indignación, de mala hostia y de pensamientos “No Future”, en fin “una desazón” un “sin vivir” no recomendable para una sociedad civilizada como la nuestra.En ese estado uno empieza a autoconsolarse con pensamientos propios de un tercer reich : “El trabajo me dignifica” o de las religiones de siempre “Lograrás el pan con el sudor de tu frente” este último pensamiento digno de reflexión ya que evoca genuflexiones.

El proceso “Me cago en la puta I Wish I could be Ronaldo”-Estado Vinagre en careto–Relativización del problema “El trabajo me dignifica “finaliza con la llegada al lugar de trabajo y aquí es dónde podemos encontrar un punto crítico, el sujeto laboral , el pringado que todos llevamos dentro una vez que su cuerpo ha penetrado en el entorno laboral efectuará un compartamiento proactivo o positivo en el caso de por ejemplo encuentre a la nueva becaria con una minifalda propia de una película tipo “Porkys” o “Desmadre en la Universidad 8” , inmediatamente olvidará la fecha del calendario y su alienación será completa , en el caso de ellas el hecho de que su pareja les haya enviado un e-mail, SMS o mensaje con caballo de postas con alguna mentira piadosa : “Eres la mujer más guapa de la Comunidad de Madrid en su distrito 28034 ” producirá el mismo efecto proactivo, positivo y alienante con el añadido de que el sujeto masculino también quedará libre durante veinticuatro horas de aserciones tipo: “Nunca me dices cosas bonitas”.

El sujeto laboral efectuará un comportamiento de rechazo, regresivo o negativo en caso de encontrarse a su Domador o Jefe de Pista (Ver artículos anteriores) a una distancia inferior a un metro. Este aspecto es crítico y discutido por la doctrina pero en algunos casos origina unos deseos irrefrenables de a)Dimitir b) Remembering la madre del jefe c)Deseos irrefrenables de comprar una escopeta.

Los Lunes son días asquerosos en definitiva y peligrosos.

domingo, enero 15, 2006

Víctimas del todopoderoso Sarlacc

Estimados amigos,

Perdonen la irreverencia, pero yo creo más en pichones que en palomas porque me siento cercano a la línea escéptica de Parménides con aquello de que “el ser es, el no ser no es”, que me dice que de la nada, nada se hace. Con esto no les estoy anunciando el futuro nacimiento de nadie (¡nooooo!), es que salir por Madrid me resulta tan monótono que me entretengo en pensar este tipo de cosas, ya que mantener con los amigos una conversación medianamente fluida es completamente imposible: la música te impide oír y el ambiente sobrecargado te nubla la lectura de labios.

Tampoco es que me aburriera, lo que pasa es que en el momento de este “pensamiento navarro” estaba siendo aplastado contra la pared por un armario vestido con chaqueta de plasticuero. La prenda olía tan a nuevo (¿regalo de Reyes?) que me estaba atacando al estómago, como cuando estás mucho tiempo en un local recién pintado, y, claro, me atacó el desvarío. A chupar la chupa ya no me atreví, porque el nota tenía dos amigos XXL, pero en un momento dado, cuando ya no podía prácticamente ni girar la cabeza, me revolví y les conminé a salir fuera para dirimir nuestras diferencias como hombres. Entre un muro de bíceps armados pude adivinar, al otro lado del pasillo, a unos hermanos fotocopia (faldón salido, cuello gordo, puños fuera, jersey de angora, vaqueros de antes) que se desgañitaban cantando “resistencia, resistencia, esto es la revolución... Somos obreros la clase preferente”, una canción de no sé qué gran artista que va de skatalítico porque vende el lema de Che Guevara (¡Hasta la victoria siempre!) y dice estas cosas tan revolucionarias, pero que no pasa de ser un producto comercial y punto... Me sorprende que, al final del tema, estos niños pijos no gritaran algo del pelo de “¡Hasta la Victoria Secret siempre!”, ¿oseano?

Fue entonces, mientras me deshacía de los tres mamotretos con la mano izquierda en la espalda, que me dio por repasar la filosofía presocrática y se despertó, de nuevo, tras años de letargo, mi curiosidad por el argé de todo, por el sentido de la vida y por la tetas de la rubia de rojo. Así que propiné dos severos mandobles finales (ya saben, mi famoso uno-dos) para rematar al de 150 kilos, me apoyé en la pared, miré a los pijos con los ojos de Clint Eastwood en “Sin perdón” y dije:

-- “Verdaderamente, somos víctimas del Todopoderoso Sarlacc”.

Perdonen que les hable de “La guerra de las Galaxias”, pero este es uno de los puntos flacos de la trilogía original: ¿por qué llamarán “todopoderoso” a un bicharraco que no pasa de ser un puto ojete en el suelo? ¿Qué poder tendrá que lo hace omnipotente? ¿Tirarse pedos? ¿Imaginan algo más desagradable que un bicho que ventosea y come por el mismo orificio? Además, menuda mierda de todopoderoso si tienen que ir a darle de comer... ¿Todopoderoso y no se vale por sí mismo?. Ustedes dirán lo que quieran, pero Sarlacc es como el abuelito mudo que o se acuerdan de él o ayuna.

Sin embargo, el Todopoderoso Sarlacc nos devora. Sé que estoy un poco críptico hoy, pero estuve horas en un bar cuyo principal atractivo es que sólo pinchan música española, algunos temas tan bonitos como el “Lalalá” versión motosierra o, lo que es peor, Hombres G cantado por ellos mismos. Rodeado de algunos de mis mejores amigos, me sentí tan extraño entre las víctimas de Sarlacc que, en un momento dado, di el salto al proscenio y me puse a cantar una jota cargadita de paragoges:

Y en el baile de la plaza-a
Auri no quiero besarte-e
En el baile de la plaza-a
Porque me han dicho en tu pueblo-o
Que te llamas José Aurelio-o-o
Que te llamas José Aurelio-o
Auri no quiero besarte-e

Arrecogiendo patatas
Te he visto el culo
No he visto chimenea
Que eche más humo

¿O acaso no es esto música española?

X. Bea-Murguía

viernes, enero 13, 2006

Petete lo intenta en solitario


Queridos y queridas amigos y amigas,

la cantidad de tinta que malgastamos, con lo que eso supone para el ecosistema y la supervivencia de los calamares, por miedo a que algunos colectivos humanos se sientan excluidos o insultados, pero, sobre todo, por ese temor faja a que el resto del mundo nos etiquete o encasille, por causa de nuestra manera de hablar, en una tendencia política o una actitud socialmente rechazable. Uno que siempre ha pensado que no insultan las palabras sino las personas y que el lenguaje sirve para comunicarse y para unir, no entiende cómo nos dejamos llevar al huerto por los políticos, cuyo juicio lingüístico es siempre (¡SIEMPRE!) interesado. Disculpen este intrincado inicio que ni yo entiendo, pero ya saben que soy tan amante del buen rollo que no me avergüenzo en confesar que aún lloro cuando recuerdo a Heidi volviendo a casa del Abuelito.

Tengo el firme convencimiento de que estas fórmulas tan correctas no pasan de ser eufemismos recauchutados y nada más, circunloquios que tienen su origen en los propios prejuicios de quienes los usan. Evitan llamar a las cosas por su nombre porque los nuevos tabúes sociales los tienen agarrotados y no son capaces de superar sus propios complejos, pero, sobre todo, son expertos en nadar y guardar la ropa.

Este tipo de eufemismo moderno es de abuso habitual de todo políticastro que se precie. A esta peña le gusta decir que "regula" cuando en verdad "prohíbe", porque prohibir está feo, es más propiamente fascista que mayo68ista. Y con esto, mis queridos amigos ni se me sulfuren ni me hagan corros, me refiero a toda la clase política.

He de confesar que cuando era joven y vigoroso, más por la imprudencia propia del púber que, aunque acaba de llegar, se cree que se lo sabe todo, tenía mucha tendencia a ser Petete y corregía el error en cuanto lo oía. Hoy ya he llegado yo mismo conmigo mismo a la conclusión de que nadie soy, no más que un mero.... Un mero. Es como si Petete se hubiera enfurrañado con Carolina y estuviera intentando la aventura en solitario, que es lo que se lleva. "Los años con Carol han sido muy buenos y enriquecedores pero ya no podía crecer más como artista (ni como pájaro)". Es lo que tiene.

Lo que no puedo evitar es reírme de quienes presumen de haberse liberado de sus prejuicios y, a la primera, se acogen a esta serie de fórmulas correctas, demostrando que quizá sea cierto que no son racistas ni fascistas ni nada que acabe en "-ista", pero que siguen cargaditos de otro tipo de prejuicio moderno que aflora en cuanto se ven en la tesitura.

Voy a ir al grano porque a estas alturas ya se deben de estar preguntando qué coño quiero decir...

Y es que, como dice Pedro Ramos, aquí, mi contraria, es presidente de la comunidad de vecinos (y lo está haciendo tan bien que ya la aclaman en los descansillos pidiéndole que renueve su cargo) y hace un rato a una pájara que pululaba por el edificio, a cuento de algo que nada aporta a la historia, le he dicho:

-- "Como mi mujer es la presidente de la...".
-- "¡Será la presidentA!"... Y ya la hemos jodido con la lista que tolosabe. Yo me muerdo los labios para no ir de Petete por la vida... Por supuesto ni he rectificado ni he intentado sacarla de su, a mi juicio, error, porque ya se sabe que en estas cosas la "contumacia popular parodia a la sabiduría popular de la misma manera que la estupidez intelectual parodia a la inteligencia" (¡toma cita de Malraux que no sabía dónde ni cómo meter!). La verdad es que me he quedado con las ganas. De ahí, este desahogo.

Al menos yo, cuando digo presidente me refiero a la persona que ejerce la presidencia y, con ello, no trato de excluir al género femenino, sino todo lo contrario. Si la mujer que ejerce la presidencia fuera la "presidenta", tendríamos que aceptar que una fémina que ama fuera la "amanta"; que la que demanda, la "demandanta"; la que denuncia, la "dicenta"; y, por supuesto, que Ana Manuel fuera actriz y "cantanta". Haiga paz, señora. Diga usted sus cosas como le venga en gana y déjeme a mí que, equivocado o no, diga que Beatriz es la presidente de mi vida.

X. Bea-Murguía

Buff, lo que me ha costado escribir esto, la de vueltas que le he dado, madre mía, para que nadie se sienta ofendido.

Estrellismo mediático


Queridos amigos:

si hay alguien en este mundo mundial que empieza a estar hasta los cojones, con perdón de los cojones, del tabaco, además del sufrido mandria que aguanta el humito de su compañero 4x4 en la cara todo el día y además de la secretaria trepa que tiene la coronilla sembrada con ceniza de puro, es el menda. Empiezo a soñar con la menestra Salgado y les aseguro que no me visitan súcubos ni íncubos ni me levanto confundido, engañado por mis sentidos, inundado por la duda metódica que se deriva de no saber distinguir la vigilia del sueño. No. Son pesadillas y creo que ya, a nuestra edad, no hace falta ahondar en la diferencia entre pesadilla y peladilla: son sueños secos como la misma menestra, que es enjuta de cara, enteca de culo y, sobre todo, caquéctica de ideas.
Este aluvión informativo sobre el tabaco, antaño símbolo de amistad hoy jinete del Apocalipsis, no se diferencia en nada de aquellas otras olas de noticias sobre perros peligrosos, los accidentes laborales o la lluvia de caca congelada que cae del cielo (¿se recuerdan?), temas trascendentales que generan gran debate social, patrocinado por Anis del Mono, y que nos hacen olvidarnos por unos días de lo mal que va el Atleti y del Estatut.
Nosotros, como adelantados que somos en esto de la generación de opiniones fundadas, estamos imbuidos en esta suerte de estrellismo mediático que empieza a ser más aburrido que leer "El código Da Vinci" al revés tratando de descifrar criptogramas satánicos. Sobre todo porque los periodistas, queridos compañeros, siempre preguntan la misma chorrada. Punto. Y como dicen Los Enemigos, "Yo digo sí y no se hable más"; y con la coletilla de Clappique termino con el tabaco: "¡Ni una palabra!" (es una cita culta para demostrar que son un tío cultural, pero no se fíen que siempre digo la misma).

(¡Pónganse los baberos de emergencia, que voy a hablar de mi hijo!)

La cosa del estrellismo mediático deriva en que el miércoles fui a CNN+ al programa de José Mari Calleja, a un debatillo relajado y civilizado sobre el monotema y, a la salida, como quiera que el Imperio se ha hecho en mi pueblo su Estrella de la Muerte, pues me dije: "Voy a acercarme al cole de mi niño, a espiarle un rato, a ver qué hace sin que él se dé cuenta".
Mi gozo en un pozo que cuando me acerco a la puerta, me encuentro de frente con mi hijo que se acaba de caer al suelo (la agilidad venía en el paquete genético de su madre) y lloraba desconsolado (y esto en el de su padre), rodeado de unos cuantos amigos suyos (Salva, José, Mauri, Irene, Mónica y alguno más que no conozco). Entre todos no sumaban mi edad, lo cual da para otra entrada ¿no creen?
Se montó un buen revuelo a mi alrededor y, mientras Mauri me preguntaba por los agujeros en mi cara, Salva por mi novia (desde luego no se puede hacer nada delante de estos niños, que luego se chotan de todo), yo trataba de consolar a mi Rodrigo quien, como comprenderéis, al verme, rompió a llorar con más sentimiento. Es tan buen actor como mi suegra, no hay que fiarse nunca, porque luego es un sinvergüenza. Ayer mismo, quiso el azar que la radio despertador se arrancara con una de los Rolling Stones y el tipo apareció en mi habitación haciendo que tocaba la guitarra como Keith Richards (pero en guapo, claro). Esto me lo ha contado Beatriz, porque yo estaba en Sevilla, pero son el tipo de cosas que le hacen a uno sentirse orgulloso: ¡Mi hijo tiene el feeling! ¿No es tierno?
Volviendo a la valla del cole, Salva insistía en que si me iba de viaje con mi novia (¡cállate niño, coño!) y José me preguntaba si trabajo en el mismo sitio que su papá y su mamá (este debe de pensar que cuando nos vamos los mayores al trabajo, es el mismo sitio y no le falta cierta razón: todo es la misma mierda) y Rodrigo llora que llora la zarzamora y Mónica me tiraba de la bufanda preguntándome si era el papá de Rodrigo (¿pero no se nota?) y, en esto, se hace un silencio y me dice Irene:

-- "Tú sales en la tele, ¿a que sí?".

Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja
Lo dijo con una naturalidad que, no sé por qué, me hizo ruborizar. Los niños son la leche. Espero volver pronto a la normalidad porque, además del mucho tiempo que me roba el estrellismo mediático, ambos lados de la tele me producen la misma desazón: unas ganas irrefrenables de ir al baño.

Besos Bego, bloguera.

X. Bea-Murguía

jueves, enero 12, 2006

La Empresa Moderna y los adictos al trabajo

Chusma indecente:

Hoy un poco de humor oficinista.

El lugar de trabajo hoy denominado Empresa puede considerarse ya en el Siglo XXI “El Circo” por el número ingente de payasos que abundan. A parte del orbe de Tonettis, Abrazatortas y Fofós, abunda una especie payasos de todos conocida: el denominado adicto al trabajo .La adicción al trabajo es una de las enfermedades de nuestro tiempo, no debemos ofender a ningún caso a esos gilipuertas que se tiran doce horas seguidas delante del PC intentando vender la mejor oferta o a submarinistas que bajaron a arreglar una tubería y no volvieron por tan perniciosa adicción.

Curiosamente el “establishment” no habla, no comenta nada de esta enfermedad psíquica de nuestro tiempo, el “establishment”, que vela por nuestra seguridad, si habla de caniches asesinos, de no hacer rallyes con motos de agua en primera línea de playa, de apuntarse a las fuerzas armadas porque luego te queda una pensión de invalidez del 9% de movilidad muy chula.

El adicto está sólo, en ocasiones a las tres de la mañana una pareja de la Guardia Civil acude al Circo y le comenta que su mujer le ha puesto una denuncia por abandono de familia y él únicamente responde que: “Ahora les atiendo, que acabo unos informes”.
El adicto al trabajo no es consciente de la productividad de coña que se vive en esta España mía esta España nuestra, para los más de ciencias les comento sin entrar en debates que la productividad mide unidades obtenidas por horas trabajadas por hombre, en ello influyen factores como adelantos tecnológicos etc... .Pues a pesar de tanto adicto al trabajo, España anda en los niveles más bajos de productividad de toda la UE.


En definitiva el problema se plantea cuando un adicto al trabajo realiza un “Brown dispatching” en castellano puro “Endose de marrón” a uno que es normal o incluso tirando a vago, yo no me considero en ninguno de esos casos, mucho peor aún, me considero consultor que en otra época sería como vendedor de crece pelo.En ese caso se da el denominado efecto pasillo o efecto escalera, en Sudamérica paradigma de la civilización el efecto “Me emborracho y le doy tremenda balasera”, que consiste en hablar con otro payaso del Circo, todos somos payasos no se asusten,diferente es que tengamos más o menos cara de gilipuertas y se relata el marrón.¿Les suena la frase? “Estoy hasta los huevos/hebe de Domínguez, me llega el tío y me pide esto para mañana... “.

Yo hago un llamamiento a acabar con esta lacra social, un llamamiento a que esta gente sea hospitalizada en un cotolengo de Aragón y a programas de reeducación financiados por todos nosotros como muestra de ciudadanos solidarios y utopistas que creen en las viviendas de 30 m2 prefabricadas y en Autovías de los años 80 ,en caso contrario el dicho popular de:”El español fino mientras el europeo trabaja se da al vino, la española si es de talante fino mientras la sueca trabaja, ella se...”, ustedes lo conocen sobradamente , huelga decirlo.

De la censura paradigmática filipina


Filipinas, ese gran país compuesto por innumerables islas paradisíacas en las que aún se puede encontrar la esencia misma del hombre, vergeles de aceite de palma y algún que otro puesto avanzado nipón que sobrevive pegado a su fusil porque nadie le ha contado que la guerra terminó en el 45.
Filipinas, ese gran país exportador de cafeterías con clase (y no como el Vips que es la miseria hecha atraco); que es rasa e igualitaria cuna ora de pijas que celebran fiestas de postín con Ferrero Roche ora de interinas de culo prieto.
Filipinas, ese gran país a cuya cultura culinaria rendir debiéramos pleitesía por sus extraordinarias galletas de chocolate, se ha convertido hoy en un nuevo ejemplo, en un paradigma del savoir-faire, al haber bloqueado la emisión del Canal Internacional de TVE por un mes.
Lo siento por José Luis Moreno, pero los españoles residentes en Manila podrán descansar por fin sin "Noche de siesta", que es para no dormir, y aprovechar para aprender tagalo con la tele estatal filipina (que seguro que emite en inglés), que es para mear y no echar gota, con programas de enorme éxito como el concurso idiota "Tan Chu Leao", el reality show, tipo vea como diez bachilleres compiten en confección de artísticas pelotillas de moco ("Glan helmano") o el galardonadísimo documental histórico "El zapatero de Imelda. Auge y declive del hombre en la sombra".
La razón del bendito bloqueo, según El País, ha sido que la censura ha considerado que supone un delito de "difusión de contenidos inmorales" la emisión de una información sobre una película de Roman Polanski, probablemente "Lunas de hiel", que "mostraba un manoseo de pechos". Así mismo, en el filme posterior, "En carne viva" de Jane Campion, protagonizada por la famosa actriz porno Meg Ryan, se abordaban "escenas de sexo con movimientos arriba y abajo".
El programa que emitió la mencionada obscenidad (y con obscenidad me refiero a la película "Lunas de hiel", que es un coñazo intragable, y no al toqueteo de tetas que es, a buen seguro, una de sus mejores escenas) fue "Días de cine", dirigido y presentado por el animadísimo periodista-teleñeco Antonio Gasset, único crítico cinematográfico que es una parodia viva de su propio deceso.
Enhorabuena a todos los manileños (qué grande el cocidito manileño y dónde vas con mantón de Manila) y muchos recuerdos de parte de los Últimos de Filipinas (aunque ya quedan pocos o casi ninguno, es decir, están en las últimas).

X. Bea-Murguía

Pdt: Escribo esta croniquilla filipina en el Ave, dirección Sevilla, cuando me sirven la cena y me congratulo de que me den cubiertos de metal. Llego a Ciudad Real, me acuerdo de Manolo Miner y me entretengo viendo "Catwoman" sin volumen (¡hagan la prueba que como peli muda no tiene precio!) para refrenar mis ansias de secuestrar el tren.

miércoles, enero 11, 2006

Michel Houellebecq


Papichulos:
Además del As, del Nuevo Vale y de cualquier diario de tirada nacional o de cualquier frikie que monta un Blog, hay gente que escribe cosas interesantes. Michel Houellebecq es una de esas personas. A pesar de su aspecto de gabacho fostiable “at any time” y de su amistad con un infraser como Arrabal, Michel Houellebecq tiene ya un catálogo de libros que les recomiendo por su temática, temática que por otro lado les resultará familiar: imposibilidad de comunicarse con los demás, frustración sexual, hipocresía con el racismo, vidas de informáticos…. Houellebecq es criticado en diversas ocasiones por ser un escritor que hurga en los prejuicios de la clase media y de ser un racista, yo no entraré en polémicas que luego caen charlas en el quinto Gin Tonic que me dejan muy pero que muy serio durante la semana.
Premio nacional de las letras en Francia en el año 1998, Houellebecq es un “must” que no debe faltar en sus estanterías junto con la edición del Quijote del centenario que supongo que es el único libro que tienen en su casa de verdad y el gato de escayola de Lladró. Houellebecq además de novelista es ensayista :“El Mundo como Supermercado” y poeta, pero admirarle hasta ese punto implica: 1) Llevar gafas de pasta 2) Ir a Malasaña (Concretamente al Pepe Botella) 3) Ver sólo la 2 .4) Comer sólo Tofu.
Uno de sus libros más curiosos es “Ampliación del campo de batalla”.Anagrama. Panorama Narrativas.¡¡Sólo 10 EUR!! donde un Ingeniero informático debe vender a sus posibles clientes una herramienta informática y bueno no se lo cuento.
Luego ya si se atreven les recomiendo “Las partículas elementales” y su última novela “La posibilidad de una Isla”. Con Houellebecq no deben esperar héroes del estilo del repelente Harry Potter, merece un análisis este fenómeno por cierto, ni Ala tristes ni literatura de Supermercado tipo “El Chamán”, “El clan del oso tabernario” o “El Chocho”, se trata de literatura más o menos de la que se ensañará en los Institutos en las próximas generaciones si no los queman antes los alumnos o salen los políticos con una norma que implique más conocimiento del individuo de la multiculturalidad de una histórica y sabia nación como Ecuador.
Por supuesto yo a Houellebecq le leo en alemán mientras saboreo unas uvas con queso que saben a beso.
Y ya saben ,hay que vitaminarse y mineralizarse.