viernes, marzo 31, 2006

La edad del lobo


Queridos amigos,

ayer celebré la amistad por partida doble: a mediodía, una partida de mus y, por la noche, una partida de fumadores. Como está hoy día el tema del tabaco, creo que partida, como si de una caterva de ladrones de felicidad se tratara, es la palabra que más se ajusta a medio centenar de personas que se reúne para aspirarle el alma a un Cohiba.

Creanme si les digo que ayer empecé a reír a las dos de la tarde y aún ahora queda un rescoldo de risa en mi boca, una pavesa del disfrute pasado. Y todo comenzó con el galanteo. Acerté a cenar con un amigo, el otro día, en un lugar cuyo nombre, Beluga, sugiere lo exquisito de sus camareras. De hecho el motivo del encuentro no era otro que el gusto de mi amigo por aquella muchacha de cuya mirada intensa tuve que huir al menos tres veces, despavorido, en mucho menos que canta un gallo.

Alabé el excelso gusto de mi amigo, pero él me dijo que lo único que le amarraba a aquel idilio inconcluso era el deleite del galanteo.

-- "Estoy en la edad del lobo", me dijo.
-- "¿La edad del lobo?", pregunté avizorando una nueva y desternillante ocurrencia.
-- "La edad del lobo es esa en que moñeas con Caperucita, pero te acabas comiendo a la abuelita".

Dicen, aunque yo no lo tengo comprobado, que en los canódromos los galgos han de ser veloces pero no tanto. La liebre sale disparada en AVE, por un raíl que la convierte en una línea marrón, que la hace pasar por verdadera, aunque no lo es, claro, pero si el galgo es lo bastante veloz como para alcanzarla, al atraparla entre sus dientes descubre el engaño y ya no vuelve a correr. Defraudado, conocedor de la verdad, el perro pierde el interés. Si lo piensan, estos perros viven en un permanente mito de la caverna de Platón. ¡Cuántas veces no se habrán topado ustedes con la decepcionante madera de la vida!

Quise contar a mis compañeros de mus lo maravilloso que me parecía encontrar gente, como este amigo, que disfruta tanto con los preparativos que desprecia la fiesta. Les expliqué cómo mi amigo justificaba su infértil galanteo, que no busca fruto; cómo se deleitaba con la metódica y laboriosa siembra que no deparará cosecha alguna, sólo más siembra; cómo justificaba el hecho de mantener a distancia a una chica que, además de una preciosidad radiante, es un agravio a la vejez, un desafío al tiempo, por temor a que la conquista apagara el embrujo o, usando sus mismas palabras, que al conseguirla, se le rompiera el "charm".

-- "¡Pero qué inocente es ese hombre!", replicó con envidiable agilidad mental mi amigo Eduardo. "¡Seguro que ya hace años que a esa chica le rompieron el charm!".

X. Bea-Murguíaaaahuuuuuuuuuuuuu

jueves, marzo 30, 2006

Estatuaje


Queridos amigos,

Como dice la olvidable copla, nuestro país podría perfectamente cantar aquello de “mira tu nombre estatuado en este trozo de mi piel”, porque la historia, buena o mala, ha ido dejando su huella en nuestra cultura y no en todas las ocasiones ese estatuado se ha resuelto como una lagarta obra de arte en la piel. La nuestra, como pasa con la de otros muchos países que se erigen hoy paladines de la democracia europeda e internacional, es una historia llena de capítulos de los que avergonzarse que dejaron impreso su chapucero tatuaje, lleno de imborrables borrones de tinta verde subcutánea. Lo que pasó, pasó y, bueno o malo, creo que, a la hora de juzgar hechos pretéritos, es lo suyo que se haga con perspectiva histórica.

Ayer una noticia que me dejó helado: Izquierda Unida de Sevilla ha exigido al ayuntamiento de la ciudad que retiren el fajín de la Macarena porque perteneció a Queipo de Llano... Casi me estrello. Esta persecución de los símbolos y huellas del fascismo es ignorante y tiene, en este detalle, su más desternillante extremo: pero ¿qué cojones le importa a IU si la Macarena lleva tal fajín o un vestidito de la Nancy? Si lo piensan bien, se empieza quitando estatuas y se acaba quemando libros... O autores. Banania se acerca.

Recuerdo que mi padre se indignaba por un hecho parecido. Camino de Euskadi, en la Nacional I, casi en el límite de las provincias de Burgos y Segovia, existe un lugar llamado "El miliario del caudillo", un estatuaje de la historia de Castilla, que el PSOE, tras su ascenso al poder en 1982, quiso borrar de la piel el país. Y mi padre decía: "Lo que tienen que hacer es estudiar más y dejarse de gestos. ¡Que cojan un diccionario y busquen la palabra miliario!". El monumento se instaló en 1970 en conmemoración de los mil años de la muerte del caudillo Fernán González de Castilla. Nada tiene que ver con la reciente huella de Franco.

Yo jamás habría quitado el estatuaje de este tipejo de la plaza de San Juan de la Cruz de Madrid. Y no es que crea que se merezca un recuerdo emocionado ni un homenaje, ni mucho menos, pero su personalidad histórica fue un hecho que ha dejado miles de huellas a lo largo de casi cuarenta años de dictadura y son parte de nuestra cultura, queramos o no. Creo que habría valido con cambiar la placa de la estatua: Francisco Franco Bahamonde, dictador.... O tirano... O, si prefieren, tirano de mierda. Eso es, como decía, imprimir un juicio histórico a las huellas del pasado. Pero tenían que haber dejado el estatuaje donde estaba. Si nos pusiéramos a derribar estatuas ecuestres de tiranos, descabalgaríamos la ciudad. Si nos ponemos a borrar nombres llenos de ignominia que figuran en las calles de Madrid (o de, a buen seguro, cualquier otra ciudad de España) acabaríamos bautizando el callejero con todos los accidentes geográficos del mundo: plaza del Monte Everest (antiguamente Felipe II, ¡ese genocida!).

No dejen de repasar del callejero de Madrid nombres como, por ejemplo, Carlos Maurrás... Escriban en Google su verdadero nombre, Charles Maurras, y sorpréndanse. En el pueblo donde yo vivo se ha dedicado calles a cada tipejo/a de espanto...

Hay un detalle en "Uno, dos, tres" de Billy Wilder que lo dice todo. No recuerdo bien la situación y no me voy a preocupar de buscarlo, seguro que alguno de ustedes es frikie de ese peliculón (como mis hermanos y yo) y se acuerdan del diálogo, pero es algo así como: "Se representará en el teatro Stalin, antes Hitler". Son una misma cosa, por supuesto.

Al final, si no viéramos las huellas del pasado con perspectiva histórica, borraríamos nuestra identidad cultural, forjada a lo largo de siglos de errores y de horrores. Cuando se enteren las feministas, esas amazonas desaforadas, de que el hombre primitivo arrastraba a sus mujeres asiéndolas del pelo, cuando sepan que las poseían a lo perro, sin consideración alguna hacia el disfrute sexual femenino... El día que lean "El clan del oso cavernario" y se den cuenta de lo machistas que eran el austrolopitecus, el neardental y el cromañón... Ese día irán a Altamira a borrar las pinturas rupestres. ¡Falocracia prognática!

Tiempo al tiempo.

X. Bea-Murguía (¡SCHLEMMER!)

miércoles, marzo 29, 2006

"Le diable au corps"



Gente diabólicamente endiablada:

“El diablo en el cuerpo” es una obra cumbre de la literatura francesa y, aún mejor, la escribió un adolescente que realmente era un enfermo de psiquiatrico sin haber ingerido ningún tipo de sustancia tóxica para ser más “cool” y “joder que loco estoy” al estilo "Historias del Kronen". Raymond Radiguet , su autor, era todo un crápula que en el perodo de la primera guerra mundial rompió los moldes sobre la literatura de amor convencional a la usanza: romanticismo puro , con frases que aún hoy se pueden oir en cualquier chiringuito, disco pub o antro, les suena?? “Te quiero”, “Eres la mujer más bella”, “Tus ojos son como luceros” “Eres lo más importante que me ha pasado” ,pues esas son frases cursis y heredadas del romanticismo que Radiguet, prácticamente desconocido en España, se dedicó a manipular, relaizando un ajuste de la realidad.

En unas 120 páginas se disecciona el amor “enfermo” de un adolescente con una chica de 20 años. Se trata de toda una lección de sadomasoquismo psicológico, de puteo “sistemático” y adulterio perfectamente hilado que desemboca en una historia muy del Nuevo Vale: embarazo, arrepentimiento, mal rollo.

La historia es real y yo me imagino que en aquella época hacia 1920 con la guerra acabada a este tío lo querrían colgar por cacho cabrón.El público femenino de la época recuerda a Raymond Radiguet como un adonis, un chico muy guapo , guapo, guapo que se las llevaba de calle silbando, en su corta existencia murió con apenas 20 años, llegó a conquistar a una de las modelos más famosas de Modigliani.Algún cinéfilo de esos que compran las películas por correspondencia también recordará que hay una película de 1947 dirigida por un tal Claude Autant Lara. Cuando escribo esta última frase, sorprendentemente, aparecen por mi habitación una chaqueta de pana, unos pantalones de pana y una pipa , me aplauden y me sugieren acompañarles a la filmoteca y a tomar unos caldos.

Una historia de descubrimiento de la sexualidad que les aconsejo a todos, el amor, desde el punto de vista de un hombre en un sentido bastante real: sin compromiso. Sorprende que un tío tan joven tuviera una visión tan realista de la vida, debería ser de obligada lectura para todas esas jovenes enamoradas de un David Bustamante, aunque dudo que el santanderino tenga un mínimo de malicia.“El diablo en el cuerpo” o "Le Diable au corps", influyó posteriormente a un Nabokov en su "Lolita" casi 20 años después.

Si desean adquirir este libro pueden hacerlo en ese establecimiento potenciador de la cultura y de la acidez de estómago : VIPS por menos de 4 Euros en edición de bolsillo.No obstante ,siempre les queda la alternativa de Harry Potter con ratones que hablan de sintoísmo,brujas bolleras y prepúberes neuróticos.

Saludos revolucionarios.

Hormon Wells

Y Mimi murió, sí, pero de una colleja


Queridos amigos,

como bien saben, me mueve un espíritu cultural de primer orden, un ansia por cultivarme que me lleva a pasar horas en el gimnasio para modelar este aspecto de Hércules que luzco y que es la envidia de todos ustedes. Los que me han visto en la piscina pueden constatar que así es.

Soy consciente, sin embargo, del riesgo que corro de ser víctima de la insidia de los mismos envidiosos que me adulan y que tienden a vilipendiar mi buena fama asidos al tópico gastado de que un físico escultural, como el mío, ha de ser por fuerza anfitrión de un cerebro minúsculo y de un pito igualmente diminuto.

Por eso, dejando el pito de lado (¡y no me lo toquen!), como procuro ejercitar también mi materia gris, decidí ir a la ópera el sábado, a ver "La Boheme" de Puccini en el Teatro Real con unos amigos. La ópera está muy bien, la verdad, y el montaje es espectacular. Consiguen crear una atmósfera que invita a sentirse, precisamente, parte de aquella bohemia de la época entrerrevolucionaria hambrienta y arruinada, pero feliz, artística y enamorada de la vida y no del dinero ni de lo material... A 200 euros el patio de butacas y 45 el palco de visibilidad reducida o nula... Vamos que, lo que es ver, no vi un puto carajo. El año pasado fui a "Madama Butterfly", al mismo palco, y lo vimos de lujo, pero porque Beatriz tenía la banqueta de delante de mí y, si ella se apoyaba en la barandilla y yo me apoyaba en ella, veíamos el escenario decentemente y sin escorzos. En esta ocasión no ha podido ser. Si mis amigos quisieran, podíamos pillar unas entradas para "El rapto del serrallo" y desquitarnos. La compañía era excepcional.

La acción no suele ser trepidante en la ópera, por lo que ver es importante pero no tanto como oír, sobre todo si ya se sabe de qué va la historia. La acústica del Real es mucho mejor que sus asientos de palco, pero al tenor que hacía de Rodolfo (un Marianico el Corto sin boina) se le oía constantemente por debajo de la música, como si cantara con sordina o desde dentro del armario... Bueno, en el caso de Marianico, como dice mi amigo Eduardo Mencía, desde dentro de la mesilla de noche.

Las dos sopranos, sin embargo, bastante mejor. Tanto Mimí como Musetta, (aunque más la segunda) consiguieron transportarme a ratos, como a mí me gusta, tal y como he dicho antes, al París romántico de la época de Luis Felipe. Una buena voz de soprano es suficiente para alimentar mi espíritu y, entonces, no me importa no poder ver nada, ni tampoco me acuerdo de la puta banqueta de bar que, por 45 euros, se me clavaba en el corvejón, dejándome impreso en el muslo un moretón de recuerdo. En ese momento, me gusta cerrar los ojos y que la aguda y melodiosa voz me envuelva. No creo que haga faltar ser un entendido en ópera para sentir esa elevación suprema que te relaja, calma tus ánimos, borra tus problemas, adormece los... Hasta que la señora de delante gargajea y te saca del éxtasis melómano. Sí, mis queridos amigos y amigas, lo redondo de la ópera el sábado fue que justo delante de mí, una señora con tuberculosis (como Mimí) me adornó toda la función tosiendo y gargajeando. Pero, ¿se puede ser más cerda y tener menos educación? Isabel, que estaba a mi lado, puede dar fe de que a punto estuve de darle una colleja.

-- "¡Señora! ¡En la ópera, NO SE TOSE! ¡Se aguanta uno las ganas!".

De remate del plan, nos quedamos a cenar en el precioso restaurante Arturo del Teatro. Después de un pequeño problema (fallo suyo) con la reserva, conseguimos sentarnos y disfrutar de una deliciosa cena (al menos, la mía) en una compañía excelente, que es la de los amigos. Lo cierto es que lo pasé muy bien. Fue una noche muy completa.

En el restaurante estaba, por cierto, Ruiz Socavón, a quien puse mi peor cara de desprecio un par de veces y también Boris Izaguirre, que, cuando se marchó, al pasar por delante de la mesa, me echó una miradita con esa sonrisa mariposona que tiene él que me dejó helado. Siempre he dicho que lo importante es gustar, sin importar a quien, así que, ¡qué coño!... Boris, si alguna vez leyeras esto, recuerda que soy el calvito guapete con cara de simpático que llevaba una camisa a cuadros... Aprovecha que pronto me voy a casar y se acaba el chollo (JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA).

X. Cabronazo-Murguía

martes, marzo 28, 2006

¡EJE!


Queridos amigos,

el hilo de pensamiento es lo que tiene, que te lleva, te trae, te empuja, te zarandea, te dirige, se hace, en definitiva, dueño de tu razón y lo que empezaba como una prometedora reflexión de brillante conclusión acaba siendo un devaneo mental transitorio por una gilipollez de tomo y lomo. Hay que estar muy centrado, sentir bullir la fuerza zen, para obtener algo de esos desvaríos propios de conductor en el atasco.

Así me ha pasado a mí, como supongo que a ustedes, cuando esta mañana me he enfrentado al atasco diario, que como llevo unos días machacándome el karma con “La sonámbula” de Bellini, me ha dado un resol en la cara y he visto la luz. ¡Una reluciente mañana de primavera! He rebuscado en el cajón del olvido, es decir, en la guantera del coche... Por cierto, ¿por qué coño se llamará “guantera” si, al menos la mía, es un saco sin fondo, el Todopoderoso Sarlacc de mi coche, un comedero de apercibimientos, multas e impuestos impagadas, el tonel de las Danaidas de los CDs? Me temo que si metiera unos guantes en mi “guantera” los perdería irremediablemente, a no ser que fueran de boxeo... Coño, unos guantes de boxeo en la guantera estarían bien para la clásica pelea en un semáforo. Se te pone uno chulo y te envistes de Rocky, el Potro de Hortaleza para defender... No, claro... Entre que te los pones, los atas con la boca y levantas la guardia para marear a tu oponente con tu famoso uno-dos y tu juego de piernas Gentleman Jim, el otro ya te ha atizado con el cierre metálico... Ya lo dicen Les Luthiers: “Nada como un buen revólver” . Entonces, ¿por qué le llaman guantera y no “pistolera”? ¿Pistolera? ¿No es lo que tiene Ana Obregón en los muslos?

¿Ven lo que les digo? Quería yo razonar sobre el Spanish Gibraltar y acabo hablando de la celulitis de Ana Obregón...

Voy a ver si me centro.

He aparcado la “Sonámbula” porque berrear el “Non piu nozze” mientras se conduce es una imprudencia, si se comprende el sentido íntimo de la ópera de Bellini, pero también porque hasta un tío cultural, como yo, al final, se acaba hartando de gorgoritos. Con miedo a ser mordido, meto la mano en la “pistolera” y, como un Tamariz, extraigo un disco que me regaló en 2001 Gonzalo Medina y que tiene un poco de todo, así, guitarrero y marchoso: lo mejor para una mañana tan primaveral.

A la altura de la M30, un charles seguido de un wah o guagua guitarrero arranca el tema principal de la serie “Shaft”, cantado por la voz profunda de Isaac Hayes, el Varón del Motown, un Julio Sosa negro. Me pone las pilas que no veas. La serie no la recuerdo, pero el remake de moda, protagonizado por Samuel L. Jackson (nunca tan gran actor se vio en peor película) era un sopor negro y reivindicativo trasnochado. La serie, en los setenta debía de tener su sentido. Los productores de Hollywood tienen vista para el negocio. Saben fabricar serie de películas clones de multicopista... Que triunfa el superhéroe: toda la Marvel al cine. Que triunfa el remake de la teleserie campanola de los setenta... "Los hombres de Harrelson", "Ángeles de Charlie", "Starsky y Hutch", "Shaft"... Con la manía que tenemos aquí de copiar todo lo malo de los yanquis, me veo en el cine viendo el remake de “Verano azul”.

"Shaft", que significa "Eje", sería una teleserie ideal en un momento de lucha por los derechos civiles en ese país racista que era Estados Unidos, pero como película no la salva ni Mace Windu. Su reivindicación está trasnochada y ya todo lo que puede hacer es dar la brasa al ciudadano que paga sus impuestos y no tiene por qué soportar chorradas. El otro día llegaba tarde a una comida en la Glorieta de Bilbao cuando me abordó una chica muy amable con un peto verde en el que se podía leer en letras blancas

ADENA.
Se me puso delante y me quiso enseñar una carpetilla llena de garabatos seguramente para sacarme la pasta (que, por cierto, no tengo):
-- "Lo siento", le dije sin dejar que tomara ella las riendas de la miniconversación. "pero yo estoy a favor de que maten ballenas".
Y me dejó seguir mi camino.
X.Bea-Murguía (¡Shaft!)
"Who's the black private dick that's a sex machine to all the chicks? (Shaft!)You're damn right. Who is the man that would risk his neck for his brother man?"

lunes, marzo 27, 2006

Pioneros del Tunning."Knight Rider" y las secuelas hispanas




Papichulos:
Algún productor de la NBC avispado en los años 80 debió de ver en un viaje a la España de entonces, las aventuras del vaquilla y compañía y probablemente surgió la idea de montar una serie de culto para cualquier tunero que se precie de serlo.Mucho antes de las tiendas Aurgui, de las llantas de 24 pulgadas, de los faros modelo vigilancia penitenciaria hubo un coche , un auto, un carro famoso, llamado “El coche fantástico” o “Knight Rider” y “Super Maquina” fruto da mais alta tecnologia usada a for da paz no planeta en países de habla portuguesa. Esta serie se merece una entrada por haber fomentado el fenómeno tunero a lo largo y ancho del planeta. David Hasselhof se convirtió en todo un mito entre los años 82 y 86, ¿recuerdan esa chupa de cuero, esa pinta de chulo puta “barriobajero”?, se trataba de todo un caballero andante de las autopistas del middlewest norteamericano, desfaciendo entuertos y resolviendo actos de bellaquería entre la basura blanca.No obstante a la gente lo que le llamaba la atención era que el coche hablase, una voz atildada, moña.... sí , pero era un sueño en la época de naranjito que el coche pudiera haber dicho algo así como “Manolo, ponte a los Chunguitos, ahora que vamos hacia Sevilla, no?” o un “Mari, se te ha olvidado comprar la leche en el ultramarinos....paro, guapa?".
El éxito de los navegadores GPS posiblemente se deba a que en el subconsciente colectivo queda el recuerdo del coche fantástico, la gente hoy no es nada sin que al subirse al coche una voz cutre y metálica, la del 95% de los GPS grabada normalmente por una Puri floja de espíritu le diga cosas como: “Gire a la derecha”, “Siga 500 metros”,”Su tabaco, gracias”.

En la mentalidad de cualquier tunero existe una necesidad de infringir las normas del Ministerio de Industria en cuanto a homologación de piezas de vehículos a motor, la influencia de “Knight Rider” es evidente.En su fuero interno, el sueño de cualquier tunero sería poseer un camión de reparaciones como el que tenía Michael, para poder en este ansia cuasi-delictiva entre ruta Madrid-Valencia a 220 y retorno Valencia-Madrid a 250 con la Guardia civil detrás, hacer esas pequeñas revisiones de motor, de spoilers, de “bafles” de 500 W.... .No se extrañen, estando en un país de millonarios potenciales por los precios de la vivienda, un camión TIR es una chuchería, el próximo Agosto estoy seguro que podremos contemplar en poblaciones tan saludables como Torrevieja , el pueblo que debe más a “1-2-3 “ y a la calabaza ruperta de España, laboratorios de tunning rodantes que fomentarán las denuncias de avistamiento de objetos volantes no identificados.No se rían, el próximo día 20 de Mayo en Benidorm agenden el primer encuentro de el coche fantástico.net , es de destacar a un individuo llamado caballero 2000, visiten http://www.caballero2000.com/, en la sección de eventos apartado Benidorm fiestas patronales se quedarán atónitos.Un papichulo de primer nivel, para quitarse el sombrero, incluso con película y todo con Joaquín Núñez, como "Miguel Caballero", protagoniza una nueva aventura. "KITT resurrection, El ataque de los tuning" así como se escribe.Les recomiendo que se pasen por la página y vean la galeria de fotos del making off. Una iniciativa sorprendente y que desemboca ya en mi necesidad de convertirme en ciudadano de Angola.

Les deseo una feliz semana, y recuerden :recorte e guarde para o seu arquivo de controle.

Hormon Wells

Barra libre de lexatin y III (¡Caraculo!)


Queridos amigos,

prometo no alargar más esta saga del ansiolítico, que no es por escasez de ideas, que aún me quedan algunas (no sé por cuánto tiempo). Les comentaba el gusto que da celebrar el cumpleaños del niño en la piscina de bolas, pagar por tener un rato de tranquilidad sin lexatin mientras los niños hacen el chimpancé dentro de la jaula.

Eso no significa que usted pueda ir allí y claudicar de sus responsabilidades, ni dejarlos ciegamente en manos de los responsables del lugar, que generalmente son chavalines jóvenes sin experiencia en puericultura y que no ven "Supernanny" porque a esas horas, los viernes, están entregados a la degenerada costumbre del botellón. El otro día, sin ir más lejos, estaba yo tratando de centrar a todos los invitados del cumpleaños de mi hijo Rodrigo en la merienda cuando detecté por las inmediaciones de la mesa a dos niños descontrolados lanzándose bolas a la cara... ¿dónde cojones están los padres de los descontrolados? Pues, tomando cervezas y aceitunas con los amigos y mirándole el culo a la rubita de verde en plan Torrente. Lo peor que puede pasar cuando dos están fuera de control es que el mal se extienda y se provoque una estampida, por eso hay que cortarlo rápido y contundentemente. El "encargado" de la piscina, desde dentro de la jaula, hacía piruetas con la psicología infantil como gran profesional pedagogo:

-- "Niños, niños, parad... Quietos, anda, porfi... Sed buenos... No os lancéis más bolitas... Que llamo a vuestro papás". Y esos niños sordos selectivos, que son más sordos que mi abuela jamando, se lo estaban pasando en grande a bolazo limpio el uno contra el otro. Decidido a despejar el peligro de una pandemia bolera infantil, repasé las técnicas de Supernanny de barrio, me acerqué a los dos becerros, les agarré de los brazos firmemente (pero sin apretar), los detuve, me puse a su altura (a un niño hay que hablarle agachado), me aseguré de que me miraban a los ojos y de que iban a entender lo que me disponía a decirles, con un tono serio, determinado, lineal y sin alterarme ni gritar. Quietos y predispuestos a entender, esboce una sonrisa cáustica y les dije:

-- "Una bolita más y os troncho los huevos".

Y mano de santo, oiga. Desaparecieron sin dejar rastro.

Después llega la parafernalia del regalo que es un horror. Asisto a esa orgía de la avaricia infantil con profundo pesar. Los niños se convierten en auténticos chacales que se apelotonan alrededor del presente tratando todos de desgarrar una parte del envoltorio como alimañas hambrientas, con la ansiedad de vampiros sedientos. Luego no le hacen ni puto caso al regalo ni lo agradecen ni lo aprecian, sólo quieren abrir otro cuanto antes en una constatación de que el ser humano es instintivamente egoísta, acaparador, Harpagón y que la generosidad y el desapego no son virtudes anagenéticas. Lo triste es que los niños de cinco años no necesitan nada de eso para jugar: a los niños de cinco años, les regalas la Playstation y prefieren jugar con la caja de cartón.

La constatación de esta teoría es Nicolás, dos años, quien en el cumpleaños de Irene, cuatro, se pasó toda la tarde tranquilo jugando con un carrito de madera amarillo atado a un cordel, al que en adelante llamaré la Playstation III: un pedazo de regalo de Reyes. Su abuelo se aburría, cogió cuatro maderos y le construyó al nieto el carro más rudimentario que he visto en mucho tiempo. No tiene ni luces ni cables, no habla ¡ni emite ruido alguno! Son cuatro trozos de madera amarilla con ruedas y una cuerda. Precioso. Amarillo. Si se le salía una rueda, cosa que sucedía de vez en cuando, el padre de Nicolás, Pablo, rodaba a por ella rápidamente, la colocaba en su sitio con precisión, reiniciaba la Playstation III y a seguir jugando. Horas de diversión.

Lo cierto es que Rodrigo no ha tenido tiempo de hacer mucho caso a todos los regalos que recibió y no es muy consciente de todo lo que tiene. Demasiado, para mi gusto. No es que yo crea que es mejor la escasez, pero esta abundancia ilimitada no puede ser buena. Un punto medio, tan difícil de encontrar a menudo, sería lo ideal. Con todos estos juguetes ha sucedido lo mismo que en Reyes, algo que conté en la entrada "Fin de fiesta" y que me sirvió para mantener una morbosa discusión conyugal on-line (¡no se la pierdan!) en plan Pimpinela. Sé que todos los padres, y amigos, que estuvieron allí conmigo piensan como yo. ¿Por qué no lo remediamos? Si nos pusiéramos de acuerdo, los niños tendrían sus regalos sin excesos innecesarios.

Algo con lo que sí hemos jugado, sin embargo, han sido los walki-talkies. Me meaba de risa con el capullo de mi hijo llamándome ¡Caraculo! a través del hormigueo de la radio. Me entraba la flojera y, como si el aparato fuera una hada madrina con antena, como si pudiera transformar todo con sólo desearlo, cada vez que él me decía ¡Caraculo!, yo pedorreaba y él me devolvía unas risotadas que son sobrado pago de mi minuta de padre.

Después le pasé el walki-talky a su madre y Rodrigo dijo:

-- "¡Tetas gordas!". Nos empezamos a reír ambos a carcajada limpia por la ocurrencia del niño, pero yo, enseguida, arrebaté la radio a Beatriz y le dije a Rodrigo:

-- "¡Oye, niño! ¿Qué te has creído? ¡Que esto no es Lourdes!".

Ni la Corporación Dermoestética, claro.

X. Bea-Murguía (cambio y corto)

viernes, marzo 24, 2006

Barra libre de lexatin II (¡Bendita lluvia!)


Queridos amigos,

"como decíamos ayer", los cumpleaños infantiles son un estrés total porque los niños son como el puto conejo de Duracell y aunque uno pudiera lógicamente pensar que un chaval de cinco años cuanto más potree, más brinque y más berree, más cansado estará y más rendido caerá en la cama, es todo lo contrario: acostarlo es como desplegar una hamaca de diseño, que no hay manera de que quede extendida.

Mi mujer y yo nos enfrentamos a la encrucijada de organizar la fiesta de cumpleaños de Rodrigo como cada año, es decir, ella lo hace todo y yo obedezco en plan "Sí, mabibi", y el cerebro de nuestra relación (que es ella, no lo duden) lo tenía ya todo pensado para, como otros años, montar un guateque en el jardín de la casa de mis suegros. Sin embargo, el clima de Madrid, con tanto nubarrón panzaburra y tanta lluvia, frío y viento, amenazaba con pasar por agua la diversión y, lo que es peor, acabar montando el sarao dentro de la casa. Así que pensamos... pensó mi mujer (y yo obedecí "Sí, mabibi, hakuna matata")... que con este tiempo inestable lo ideal era ir a la piscina. A la de bolas, claro. Como la de la foto, pero con un poco más espíritu de rebeldía, un poco más de desafío a las leyes... de la gravedad.

Las piscinas de bolas son, para todos los mayores de 16 años, un invento tardío. Siempre hay uno que te hace el comentario:

-- "Estas cosas en nuestros tiempos no existían", que es verdad, no existían. Sin embargo, algo en mí me impide verme dentro de esa malla que, en el fondo, es una cárcel revestida de inocencia, potreando, brincando y berreando hasta la exaltación nerviosa aguda. Cuando me dicen tal cosa, mi cerebro siempre evoca la figura de mi madre, con cinco monstruencos en el parque tradicional, niño no te tires por la cuesta con el patín, Manolito no te pegues con tu hermana, Joselito cómete el bocadillo y el otro que se mea encima y, en fin, no sigo porque pienso en mi madre, mártir, y me entra el tembleque. Creo que ella tendría mucha más justificación que nosotros para clamar: "¿Y por qué coño nadie inventó las piscinas de bolas en 1978, cuando mis cinco hijos tenían edades comprendidas entre los 9 y el año?".

"¡Bendita lluvia!", pensaba yo mientras me tomaba una cerveza, relajadamente, en la barra de la piscina de bolas, charlando con el Pescailla del Guadiana y el Frutero (antes de que este se tirara a la piscina de bolas con la excusa, triste excusa, de tener que atender a su hijo Nacho) y con el resto de amigos que trajeron a sus hijos para celebrar el cumpleaños del mío. Después me vino a la cabeza el cumpleaños de Irene, al que habíamos ido justo el día anterior, y la imagen de su padre, Javier, contando niñas me causó un suspiro de alivio: "¡Bendita lluvia! ¡Bendita!".

Las piscinas de bolas son el invento del siglo y que se dejen de la informática, el teléfono, el coche o la muñeca hinchable. Llega usted allí con sus 15 niños, los mete en la jaula, que casi no salen ni para merendar, se acoda en la barra y a disfrutar de un rato de asueto. En esta a la que fuimos nosotros... ¡Hasta te ponen aceitunas con la cerveza! Una felicidad completa. Además, los padres de los otros niños se pueden quedar a darte charla (como fue el caso, gracias amigos) o se pueden pirar al cine, que había por allí un par de zagalas modernas, de estas ante las que no es necesario agacharse para ver las bragas, que se encargaban de todo.

Sé que les prometí hablar de regalos, playstations y de walki-talkies, pero lo voy a dejar para mañana, en "Barra libre de lexatin y III (¡Caraculo!)", porque hoy me he extendido mucho y ando jodido de tiempo (mi ciervo está a punto de despertarse y comienza mi rutina).

X. Bolas-Murguía

jueves, marzo 23, 2006

OPAS de aquí


Papichulos:

Mirando por los ventanales de la Castellana esperan a que otros como ellos estén en torno a una mesa. Si en ese momento pudieramos estar allí, contemplariamos gente sana que fuma Marlboro y veranea en Sotogrande sonriendo y contando sus extraordinarias vidas, vidas de consejero de administración. Las vidas extraordinarias se basan en algo así como “Putas, coches y Don Perignon” y por lo tanto su sustrato principal es el dinero.Y ¿cómo conseguir más dinero?, pues a través de las fusiones y adquisiciones, sí, sí...... les suena a lo de las OPAS.

Mucha gente admira a grandes futbolistas, actores, políticos.... y hay otro tipo de gente que admira a la gente que está “On the business”, los que manejan el cotarro en los negocios.Durante los últimos meses, y creo que acabaré escribiendo una carta a todos los directores de periódicos de información general y revistas económicas faltando al respeto, el coñazo llega ya a límites insondables con la famosa OPA de la compañía del gas a la compañía de la luz.Lamentable y decimonónico por los sectores de los que hablamos: utilities.Sin entrar en un análisis profundo del tema a nivel de la importancia de una utilitie en la economía, no deja de ser sencillamente más que un servicio público y suele ser estratégico en economías autárquicas y para eso lean a Samuelson o compren El economista, el tema es bastante cutre y no da más de sí.

Pero claro, como les decía hay gente que admira a la gente poderosa que veranea en Sotogrande y emite frases tan tántricas como “Ahora hemos puesto el semen, y creo que lo hemos puesto bien.” al anunciar públicamente la OPA.Qué poética y que tántrica esta frase del Señor Gabarró, el señor que maneja el tema del gas, el butanero venido a rico. Yo no sabía que hacer un Máster en el IE o en el IESE concedía esas facultades para la poesía y el rollo tántrico. Pero analizemos más profundamente el tema. Con esta frase se esconde algo perverso, una doble intención: ¿Sectas sodomitas en los consejos de administración?, ¿perversiones ocultas de butaneros activos, sobre “chispas” pasivos?.
Yo recuerdo jugando al Mus, el Ilustre Procurador de los Tribunales Jaime Briones Sanz decía una frase castiza : “Ya está papá encima de mamá” para referirse a una partida de que se estaba ganado, pero lo del señor del gas nos lleva a temas sórdidos e incestuosos dentro de la oligarquía financiera de España.

Al tratarse de una frase emitida por alguien perteneciente a la élite de los negocios debería incluirse en un diccionario de autoridades o de protocolo. Usted llega de vacaciones con su pareja y le preguntan sus familiares acerca de su próximo hijo pues queda bien decirlo : “Ahora hemos puesto el semen, y creo que lo hemos puesto bien.” Sin complejos , de forma clara y concisa.

¿Dónde hay que firmar para que no se sigan dando este tipo de noticias?.

Desde el entorno de la mediana empresa de extrarradio.

Hormon Wells

Barra libre de lexatin I (El ataque de las clones)


Queridos amigos,

respecto a ETA, sólo diré lo que se atribuye a Josep Pla (aunque yo no lo tengo comprobado): "Urge esperar". Para alto el fuego, el de Elena Salgado y su ley antitabaco. Entre fascistas anda el fuego.

El pasado fin de semana, como algunos de ustedes saben, he tenido la agenda llena de cumpleaños infantiles, que ya a ciertas edades es una oportunidad de oro para el fino arte del "encasquete". Hasta ahora, el cumple del niño era una excusa para tomar una cerveza con los amigos (¡Ah! Por cierto, traete a los niños que es el cumpleaños de Manolín), pero eso ya es finito, meus mol estimats amics, ya que Manolín ya empieza a elegir a sus amiguitos y sus decisiones son irrevocables.

Así que llamas al papá o a la mamá del amiguito del cole y le dices que Manolín quiere invitarlo a su cumple...

-- "No, a ti, no. A tu hijo".

La tradicional invitación de toda la vida no se puede llevar a clase porque te arriesgas a que se te presenten 25 encasquetadores finos en casa con niño y, lo que es peor, con regalo. El teléfono es directo, personal e intransferible. Dios guarde a Alexander Graham Bell. (¡Gutemberg, cabrón!)

-- "¿A las cinco y media?", te dice el papá o la mamá. "¡Tan tarde!".
-- "Bueno, es que es una invitación a ME-REN-DAR. No a comida, merienda y cena".

Y luego se te presentan un poco antes con el ciervo, arañando minutos al reloj y te dicen:

-- "¿A qué hora lo recojo?".
-- "A las siete y media, más o menos", una hora lógica porque cuentas con que necesitas un par de horas para bajar la sobreexcitación de tu becerro, más bañarlo con traje de hule porque con el tembleque se pone todo de agua hasta el culo, darle de cenar, hacerle un cola-cao con lexatines y a la cama al primer bostezo.

-- "¿Siete y media? ¿Tan pronto? Es que no nos da tiempo a ir al cine".

Así pasó el otro día en el cumpleaños de Irene, cuatro años, que empezaron a llegar niñas clones de colegio de pago, todas rubitas y todas con el mismo abriguito bueno y su canesú (por cierto, toda la vida cantando la canción y nunca he sabido qué coño es un canesú) que al pobre papá de Irene casi le da un telele. Iba necesitando un par o tres de lexatines. No me extraña, porque le hicieron la del pulpo. Iban llegando padres y soltando criaturas allí y Javier, entre pon la piñata, que ese niño llora y nene la merienda, pasaba atacado por el cumpleaños contando niños...

-- "Una, dos, tres...", ansioso, como hace él siempre. "Joder, es que son todas iguales", me decía viéndome que me estaba descojonando. Le daba miedo perder a una. A punto estuve de decirle:
-- "Esa niña es como un dolor, Javi. Si les dices a sus padres que se te ha perdido, cuando vengan, te van a dar su teléfono para que les llames cuando la encuentres".

Y Javier contaba como quien cuenta lagartijas en un bote. Una de las mamás entregó a su nena clon y le dijo a Esther, la madre de Irene, que la niña es alérgica a cuatro cosas y, claro, luego acuérdate de cuál de ellas era la alérgica. Las clones hicieron la del trilero, que en cuanto se movieron un poco los cubitos vete tú a saber dónde está la pelotita. Yo, en su lugar, le habría pintado un equis roja en la espalda y le habría puesto una mordaza y arreglado.

A la hora de la tarta, mi hijo Rodrigo se negó a comerla porque dijo que era de princesas (¡BIEN HECHO!), mientras que los hijos de los amigos la devoraban con ansia y algunos padres, también. Por supuesto, a todos ellos les fue recordada la frase de mi hijo... "¿Sabes que tu hijo está comiendo tarta de princesas?". Las niñas clon, incluida la alérgica, se pusieron las botas.

Al final, cuando los papás y las mamás fueron retirando clones (es de suponer que nadie se equivocó y que todo el mundo se llevó a la suya y a la alérgica a La Paz a ponerle antiestamínicos en vena), cuando la calma empezó a cundir, Ernesto V.P. entró en el bucle y se puso a cacarear como un loco:

-- "Tiene gripe aviar", me dijo su padre resignado.
-- "Yo creo que tiene sobredosis de tarta de princesas", le dije yo. "¿Le gustan a tu hijo las películas de vaqueros?".

Mañana, en "Barra libre de lexatin II (¡Bendita lluvia!)", les contaré algo sobre la Playstation III, que ya ha llegado a España (Nicolás tenía una de color amarillo), el diluvio, la piscina de bolas y, sobre todo, los walki-talkies...

X. Bea-Murguía

Hoy, 23 de marzo, hay unas cuantas efemérides que a mí siempre me gusta recordar. La primera es que es el centenario de mi abuelo César, que nació en Zalla, Vizcaya, en 1906. Felicidades abuelo. Además, es el cumpleaños de mi primo Coe, que no leerá esto y por eso le llamaré, y también de Miguel Guerrero Paz, el miembro viril del instituto, el único hombre oxímoron que, además, se parece a ZP.

miércoles, marzo 22, 2006

Almodóvar siempre es lo mismo



Postmodernos de coletilla:

Siempre que Almodóvar realiza una película pues es un “must” ir a watchearla como diría cualquier individuo del DF y a eso mismo fui el lunes por la noche como homenaje a la llegada de la primavera y después de un puente bastante agitado.Por cierto, quiero felicitar a todos los comeflores porque ya es primavera y pronto empezarán las jornadas de parque-pota-papelera quemada-municipal-suspenso-septiembre.

A los artistas cuando se les acaban las ideas les da por copiarse a si mismos en un intento desesperado por salvar la imagen pública, vamos, para que nadie diga la frase lapidaria típica de “el artista X...está acabado” mientras saborea un caldo en la Rastaberna de Ríos Rosas.”Volver” es simplemente eso, volver a ver la enésima película de Almodóvar con los tópicos de siempre: la familia hortera, el amor a la madre y el suceso truculento de alucine de la portera de turno: esta vez se trata del incesto. Almodóvar me parece creativo y original pero esta vez creo que comienza a ser más de lo mismo, sus referencias a la España más profunda, ya saben, la España del chándal, del “me se ha ocurrido”, del bocata de chorizo que era una crítica de la posmodernidad a los comportamientos bizarros hispanos hoy ya están bastante superados y en la película esa estética feista de ciudad queda incluso difuminada con las cosumbres ya de por sí horrorosas de una región tan bizarra como La Mancha.

Repaso a las actrices: Penélope Cruz, diva del momento en España, desarrolla una interpretación bastante aceptable, teniendo como tiene más oportunidades que otras actrices para “interpretar”. La niña de Alcobendas lo hace bastante bien y en poco tiempo seguramente acabe regresando al cine español por la falta de oportunidades en el cine USA. Esta mujer, Nacho Cano no le enseñó o ella no se dio cuenta que los potenciales papeles que ofertaría cualquier director de casting en USA para ella redundan en: asistenta cubana en Florida, asistenta mexicana en Phoenix, asistenta puertorriqueña en New York.Estarán de acuerdo que Antonio Banderas ha seguido una carrera análoga con papeles como: jardinero en Texas, chapero de New York (revival de su pasado Chapero de Chueca) y el Zorro.Penélope en definitiva podría quedarse en España y llegar a ser la mejor actriz europea en poco tiempo.

Carmen Maura es la actriz en la que todas esas jovencitas con ambiciones de llegar a ser actrices, esas que andan por el mercado de Fuencarral sin lavarse el pelo y con un libro de Coelho deberían fijarse. Un referente en la profesión, no entiendo como el cine es tan cruel y cuando pierdes la juventud te condena al ostracismo.Carmen Maura es un icono pop patrio y cuando la juntamos con Chus Lampreave pues ya se acaban las palabras porque el magnetismo está segurado.

Les recomiendo la película, e incluso si consideran La Mancha como territorio interesante, que visiten Campo de Criptana, pueblo que suena a comic de Superman, tierra de Lumis y de Molinos.

Desde Majadahonda.

Hormonwells

Los muy hijos de Putin


Queridos amigos,

puede que Putin tenga hijos, pero nunca lo serán tanto como su padre. ¿Qué manualidad le habrán regalado por San José? ¿Una AK47 de plastilina? ¿Una goma de borrar conciencias? De ser yo hijo de Putin, le habría hecho un mural con el capítulo famoso de la vida del papa culpable Inocencio III, que declaró la guerra a la herejía como George W. Bush y el mismo Putin se la han declarado al terrorismo internacional, ese pastiche cambalachero que es como la ruleta, que pasa y que falta, que ni están todos los que son ni son todos los que están. Fíjense qué poca diferencia. Los culpables de herejía cátara no se distinguían en nada, públicamente, de los buenos católicos, apostólicos y romanos, aunque era de sobra conocido que en la privacidad cómplice y satánica de sus conciliábulos, fornicaban entre ellos y se dedicaban a sodomizar gatos y otras beldades por el estilo, haciendo caso omiso de la máxima de San Onancio, formulada en su famoso libro "De res zambombis":

"Cuan fornicare non podere, con la tua manum cascatorum esse".

Y es que San Onancio sabía latines. No digo más que fue a evangelizar las indias y se lo encontraron finado en la gran cascada: esguince mortal de muñeca. Cuando uno se toca, te toca y te ha tocado.

Siguiendo con la indudable analogía entre los hechos del papa de Roma y el zar de Moscú, Inocencio manda a la ciudad de Beziers un poderoso ejercito de cruzados para exterminar esa herejía cátara pero, tras un breve asedio, los cruzados se plantan ante la disyuntiva: si bien era cierto que aquella ciudad estaba plagada de herejes a los que pasar a cuchillo, como hizo Josué, por orden de Dios, con los habitantes de la tierra de promisión, no lo era menos que en Beziers también había muchos buenos católicos. ¿Cómo distinguir a unos de otros? Me imagino a Putin en la encrucijada del colegio secuestrado en Beslán (Osetia del Norte) por terroristas chechenos.

Parecía claro que, al entrar a saco los cruzados en la ciudad, todo aquel que en ese mismo instante fuere sorprendido untando mantequilla al rosetón de un minino se podía dar por empalado. Su funesta actitud no dejaba espacio a la duda. En el caso de Beslán, debemos imaginar que todo aquel que midiera más de metro y medio y llevara un arma automática en la mano...

Sin embargo, la soldada tenía su pesar, ofreciendo pruebas de personalización de la masa (no siempre sin conciencia), así que preguntaron al interlocutor papal, Arnaldo Amalrico, un tipo con nombre de hijo de putin (y que me perdonen todos los Arnaldos que no lo sean por no hacer distingos, pero de eso va hoy la entrada), quien resolvió con la famosa frase: "Matadlos a todos, Dios reconocerá a los suyos". Nadie ordenó el uso de la fuerza en el colegio de Beslán, pero mataron a 333 personas, y aunque la mitad de ellos eran niños, no se crean que los 160 restantes eran todos terroristas.

Hace un mes, me encontraba yo en el pequeño atasco que se forma en la incorporación a la M-40 en dirección a Colmenar Viejo desde la carretera de Burgos, parado en la bajada del viaducto, que conforma una atalaya privilegiada, cuando vi un enjambre de luces azules que venían hacia mí. ¿Serán ángeles del cielo?, me pregunté. ¿Serán ovnis en vuelo rasante? ¿Será la esperada invasión marciana profetizada por Nostradamus y llevada al cine por Tim Burton? O quizá no, reflexioné, una parada con tanta sirena y tanto griterío sólo podía ser una desviada cabalgata del orgullo gay. El impresionante despliegue de luz y color ocupaba, al menos, medio kilómetro en todo el ancho de la carretera. Recuerdo que pensé: "Alguien que va rodeado de tanta policía, sólo puede ser un peligroso asesino". Pero, después, cuando pasó, me di cuenta: se trataba de Putin.

X.Beatus-Murguiae

martes, marzo 21, 2006

Recuerdos de su prima


Queridos amigos,

llegada esta fecha me acuerdo siempre de un profesor mío de la carrera, que impartía Bibliteconomía y Documentación, de apellido Sagredo (no sé si es que el nombre de pila es un legajo perdido en los archivos de mi memoria o que realmente nunca lo supe, porque nunca me importó). De sus clases, sin embargo, todo poso intelectual que conservo se halla en el cajón de la "O", donde una sola carpeta vacía responde a la entrada Otlet, Paul, alguien que debió de ser el Saussure, Ferdinand de, el Einstein, Albert, el Gardel, Carlos, o el Landa, Alfredo, del sagrado... Del divino... Del exquisito arte y oficio de archivero. Un verdadero ratón de biblioteca, un biblioplasta insufrible.

Un día como hoy, hace ahora once años justos, llegué a clase de Bibliotecodormía el primero, como acostumbraba y no precisamente por entusiasmo. A veces me daba pena el pobre hombre porque realmente, aunque él se esforzaba, nunca conseguía un aforo superior a seis o siete personas. Era triste como los churretes de tinte que le pintaban la frente como si se hubiera puesto una corona de espinas y se estuviera desangrando de orgullo.

Al entrar en clase, me lo encontré de frente y me dijo:

-- "Recuerdos de tu prima", luciendo marfiles doblemente falsos, porque eran de palo y porque le jugaban en clase malas pasadas a lo Alipio, un borracho de pueblo que en plena apoteosis alcohólica se ponía en el centro del frontón a hacer malavares con la dentadura postiza.

-- "Gracias", le dije con naturalidad. Mi prima Mónica me había precedido en la carrera y había sido alumna suya el año anterior por lo que, aunque me parecía difícil que se la hubiera encontrado esa mañana, no era del todo inverosímil. Supongo que iba acarajado, dispuesto a echarme la siesta en clase, en ese estado mental en que aceptas cualquier cosa, sobre todo, porque te resbala. Sin embargo, noté que el buen hombre se quedó cortado.

Un largo silencio después, sólo roto por un leve crujido, que atribuí a su manera orate de mover los ojos en círculo y a derecha e izquierda, y por el rítmico e impaciente golpeteo en la mesa con las yemas de los dedos, tics ambos que metamorfoseaban a Sagredo en el mismísimo muñegote de Ronald Reagan de los "Spitting Image", entró otro alumno y el documentalista volvió al ataque:

-- "Recuerdos de tu prima", le dijo.
-- "¿De mi prima?", respondió el alumno.
-- "De tu prima... Vera", remató Sagredo sujetándose la valla como Alipio y riéndose a úvula vista.

Era 21 de marzo. Primer día de primavera. Once años han pasado y tengo este capítulo archivado en la "I" de imborrable. (Esto no es mío, aclaro, sino de Rafa Reig en "Sangre a borbotones", de quien lo tomo prestado).

Mi compañero y yo cruzamos una mirada atónita, perpleja, desazonada... Yo me di cuenta de que, para más inri, había quedado como un borde con el pobre Sagredo, que se habría pasado horas pensando en la gracia, ensayándola mentalmente, adelantándose a la respuesta del primero que entrara en clase, que, según su estrategia, debía haber dicho: "¿De qué prima?" y no "Gracias". A buen seguro que el hombre ni siquiera recordaba que había sido profesor de mi prima Mónica el año anterior, porque ese alemán que las vuelve locas ya había devorado, como un virus informático, su carpeta de la "M".

Al final del año, Sagredo me puso un notable. Teniendo en cuenta que de toda la materia sólo recuerdo el nombre vacío de contenido de Paul Otlet, a quien he puesto cara hoy buscando su foto en Google (y, por cierto, menudo rostro de ser el alma de la fiesta, si parece mismamente que les están hurgando en los cajones... los del archivo), he de confesarles a ustedes que obtuve tan alta calificación porque siempre fui un pelota redomado.

Así que hoy es primavera, por fin, y ahora empieza lo bueno: el calorcito, las gafas de sol, los accidentes de coche por mirar donde no se debe... Hoy es ya primavera y, dentro del espíritu transgresor que quise explicar hace un par de días, en la entrada Transgresión, entra, ¿cómo no?, que uno hace este ejercicio de nudismo interior cada mañana a sabiendas de que entre las aficionadas al blog se encuentra Pilar, mi suegra, que hoy, el día que nacieron todas las flores, cumple años... No diré cuántos, pero hay gente que parece que se queda estancada en los dieciocho. Muchas felicidades, Pilar.

X.Paul-Otlet

PDT: Recuerdos a todos de parte de su prima.

lunes, marzo 20, 2006

Ponga un marica en su programa...


Queridos amigos,

como saben, hoy es fiesta en Madrid, por lo que, a estas horas, yo debería estar en la cama (que es donde mejor se está cuando llueve), pero, en fin, en consideración a aquellos de ustedes que estén en estos momentos en la dura feina, hablaré, siquiera brevemente, de la película "Crash".

¡Es la hostia!

¡Vayan a verla!

Bueno, voy a decir algo más... Aunque no mucho.

Llevo dos días pensando en los jugosos personajes que presenta, en cómo los retuerce, en cómo Paul Haggis (que es guionista de "Million dólar baby") te descubre la verdadera manipulación a la que, normalmente, te someten. Es algo que siempre dice mi hermano Luis, cuando va con sus presentaciones por los colegios diciendo a los niños...

-- "Noooooooooooooo, nenes, la industria e' güena".

Aunque ninguno le creemos, Luis tiene razón. La industria para la que él trabaja es como "Crash". Estamos acostumbrados a que, cuando nos cuentan una historia, nos digan de entrada quién es el bueno y, por tanto, a quién debemos brindar nuestro apoyo, nuestras esperanzas, nuestras lágrimas... Da igual que sea un asesino despiadado como James Bond, que un mono de 20 metros de alto, que la pastora Catalina: una vez que estás en el cine abierto de neuronas, tu capacidad de juicio depende de cómo te presenten la historia.

"Crash" es una película redonda en la que el que es bueno, no lo es tanto, y el que es un capullo integral, pues tampoco, lo que hace que los personajes sean tremendamente reales, creíbles, humanos... Nadie te decepciona y nadie te sorprende, ni siquiera el particular policía que interpreta Mat Dillon, un tío tan miserable y, sin embargo, tan lleno de ternura, que dice una frase definitiva:

-- "No has empezado a conocerte". Es bestial, en un contexto que yo no voy a contar aquí (evidentemente).

Sólo un apunte más: aparte de los infinitos detalles que a lo largo de estos dos días voy recordando y que me dicen que debo verla otra vez, el rollo del que se habla en "Crash" viene a España con toda la estupidez de la paridad, que va a conseguir lo contrario de lo que se propone, y el lema que parece reinar en la puerta de todas las teles patrias que, últimamente, es: "Ponga un marica en su programa: hablará bien de usted". La discriminación positiva me pone los pelos de punta.

No puedo decirles más que vayan a verla y cuánto antes mejor. Llevo dos días comentándola con mi Bea (que ya la ha visto dos veces porque es lista) pero estoy deseando hablar con más personas pensantes, para sacar otros puntos de vista antes de ir a verla de nuevo.

X. Bea-Murguía (que se vuelve a la cama)

viernes, marzo 17, 2006

Movidón tronco, un pedo que lo flipas



Papichulos:


“¿Van a salir los sevillanos por la tele y nosotros no? abre bien los ojos y agudiza la memoria porque aquí lo llevas: MACROBOTELLON internauta 17 de MARZO VIERNES en EL FARO DE MONCLOA a partir de las 21:30 vas a dejar que te lo cuenten??? envíalo a tus agregados, no rompas la cadena...cuál sonará mas sevilla o madrid? CORTA Y PEGA Y PÁSALO A TODOS LOS Q PUEDAS!!!!!”.

Manifiesto del Macrobotellón para hoy 17 de Marzo recibido en mi buzón de correo.

La sociedad evoluciona. Entre el XIX y el XX se juntaban tres o cuatro señoritos de provincia que vivían normalmente en París y después de unos vinos pues montaban un manifiesto dadaísta, un manifiesto surrealista.... y pues quedaba bastante bien para que luego las futuras generaciones lo estudiaran en los colegios, culturilla de la que luego pues tampoco se habla normalmente excepto cuando se juega al Trivial o uno se intenta ligar a una sueca, que por cierto a mi hay una sueca que me está matando a disgustos, dando el mensaje subliminal de “En España también vamos al cole”, así en plan complejo de español.

Estoy completamente a favor del macrobotellón, es más, estaría bien que se realizara no en el Faro de Moncloa ya que la zona es un jodido campo de batalla entre túneles al infierno, excavadoras y autobuses al extrarradio, a mi me inspira más pues ir al Pardo cerca de la entrada dónde viven nuestros amigos los Bobones y realizar un concurso de a ver que sector del macrobotellón provoca: A) Que Leonor se despierte. B) Adivina cuánto tiempo pasa entre que Leonor se despierta y se avisa para despejar el área C) Adivina que cadena de TV retransmite la ensalada de hostias que caerá a posteriori.

Intentaré brevemente hacer un retrato robot del autor o autores del manifiesto que a Valverde aka Chuchi Cos le dejará alucinado:

Frase : “¿Van a salir los sevillanos por la tele y nosotros no?”, estoy seguro que esta arenga procede de algún individuo de Teruel o de algún concursante frustrado de alguno de los programas más vistos por nuestros lectores.Es esa rivalidad creada por el anuncio de Fairy entre aquellos famosos pueblos de Villa Arriba y Villa Abajo pero evolucionado, en plan autonómico.

Frase : “abre bien los ojos y agudiza la memoria”: En un intento de ser retórico el interlocutor construye una frase que llega a lo hortera, es la frase de cualquier libro de management tipo “¿Quién se ha llevado mi queso?”

Frase: “porque aquí lo llevas: MACROBOTELLON internauta”, el “porque aquí lo llevas” inspira cultura de Macroclub a las afueras de Toledo, el retrato robot del Sujeto empieza a configurarse, el autor es un amante del Tunning,o una kie de Alcalá ,de esos que compran un coche en un desguace por 6000 Eur y lo tunean por valor de 40.000, precio final 46.000 Eur.Un sujeto poco inteligente y Tunero, obvio.No estoy de acuerdo en absoluto en el tema de Internauta, un respeto.

Frase: “envíalo a tus agregados”. ¿Quién coños utiliza una frase así?, una de dos, o se trata de un conocido Director de operaciones un tanto moña que alguno de Ustedes conoce o estamos frente a un hermano Sudamericano.

Deseo lo mejor para el macrobotellón de este Viernes, una curiosa manifestación del siglo XXI, muy nihilista.

Hormon Wells

Transgresión


Queridos amigos,

la entrada sobre Pablo Milanés de Hormon Wells y una conversación que mantuve ayer con David Torres me ha llevado a pensar en el verdadero espíritu de transgresión que me gustaría que imperara en este blog.

La transgresión es divertida, o por lo menos a mí siempre me lo ha parecido, y es buena en tanto en cuanto haga que se remuevan las verdades inmutables, los grandes pilares que sostienen altísimos y falsos techos, aquellos axiomas que son siempre iguales, aunque los defiendan bandos enfrentados. Un problema general en este país es que confundimos con mucha facilidad transgredir con agredir o remover conciencias con manifiesto mal gusto.

¿Sale un gran genio del cine y saca un coño con una rosa y quiere remover la conciencia de quién? Yo qué sé. (¿Qué nos quiere decir Worren Sánchez con esto?) La transgresión debe ser inteligente, sutil y sugerida y, sobre todo, debe hacer saltar de su asiento al público. La mitad de ellos se cabrearán y saldrán del cine diciendo:

-- "¡Que grandísimo hijo de puta!". Ahí habrás dado en el clavo.

Pero la otra mitad, la que no está enfadada, se irá a su casa pensando:

-- "¡Que grandísimo hijo de puta!". Y ahí habrás dado en el clavo dos veces.

Entonces, cuando con tu medio de vida has querido expresar cosas que sabes que van a cabrear, a sentar mal, a causarte enemigos... Entonces, eres transgresor. Con lo otro, eres guarro o tienes mal gusto o actúas simple y llanamente con ánimo políticamente correcto.

Existe un amplio ramillete de temas sobre los que, hoy día, hay una sola opinión aceptable. Sola una (grande y libre) de la que nadie se puede salir. Hay que cruzar esa línea porque si no lo hacemos, nos aborregamos.

Se está estableciendo, poco a poco, un sistema de verdades inmutables y televisadas all-night-on que hace que la democracia española sea cada vez más mierdera y tengo para mí que si ser demócrata es apoyar este sistema de inmoral dictadura de la mayoría (la verdadera democracia protege a las minorías aunque fumen), de buenos y malos y de revival brasa incesante que machaca, machaca y machaca todo el tiempo sobre los mismos principios gastados y hechos pasados, yo me borro.

Si me vuelven a sacar los trenes del 11M o al abuelito de Zapatero (que me aburre más ya que el abuelo de Víctor Manuel, que, según tengo entendido, fue picador allá en la mina), de verdad que yo paso de ser demócrata. Prefiero ser partidario de Idi Amin, un tipo que lo tenía todo: se definía izquierdista (sí, de verdad, de izquierdas, como Mao y Stalin), antioccidental, musulmán, antiamericano y antijudio y, por tanto, supongo que por alguna enferma o estrafalaria asociación de ideas digna de un enfermo mental como él (o, quizá, no tanto), se declaraba abiertamente admirador de Adolf Hitler. Un indudable transgresor, amigos y amigas, un oxímoron grasiento y con gorra de plato, un chiste negro que suspendió en su juventud el examen para ascender a sargento; alguien que de manera oscura subió al poder y que acabó siendo culpable de genocidio en Uganda, un tirano torturador y asesino, un violador y, por tanto, un bastardo que, como todo los hijos de puta, murió en la cama. Díganme ahora si un negro nazi y de izquierdas no puede con justicia ser definido como un auténtico y genuino negro de mierda.

Un día les contaré mi desangelador despacho con un padre de la patria, el senador de la Entesa Catalana de Progres, Ramón Espasa: ¡un demócrata! No se me ocurre peor insulto.

X. Bea-Kampala

jueves, marzo 16, 2006

Don Pablo




¿Cómo pueden llegar las musas a esos páramos de inhóspito rizo ,cómo puede penetrar la supuesta lírica en un individuo Pelo Chino?. Para muchos, Pablo Milanés es el último de los trovadores cubanos, uno de los creadores de la nueva trova cubana. La nueva trova cubana surge en los 60 tras la revolución cubana uno de cuyos principales logros fue nacionalizar las casas de lenocinio, casas de putas para nuestros lectores de Ciencias que anteriormente estaban en manos de la mafia de Florida.¿¿Me copian brotels??.El caso es que en los 60 ya había influencias de otro pelo chino destacado el Zimmerman aka Bob Dylan y un coñazo abisinio como Joan Baez, rollito pana vamos... e influye a los cantautores del cocodrilo verde.

La necesidad de crear iconos revolucionarios y mitos populares en la isla, lleva a Silvio Rodriguez y a Pablo Milanés a destacar entre los numerosos cantantes que pegan la chapa a los turistas y trabajadores del antiguo COMECON: rumanos, búlgaros, rusos.... .El mal se extiende fuera de la Isla y curiosamente aparece como la gripe del pollo, sin avisar: algún mochilero de la época lo trajo y nos encontramos con sus “Versos a José Martí” 1973 que es francamente visto en el 2006 una obra susceptible de ser denunciada por perjudicar gravemente la salud.Pero ahí no queda la cosa, al ser un icono facilmente conjuntable con la trenca, las chirucas y los libros de Trotsky,Don Pablo genera una fiebre Camp de altas dimensiones, y la brasa está servida : “Canta a Nicolás Guillén”1976, disco que recomiendo para que las vistas se vayan pronto de casa, el increíble y egocéntrico “Pablo Milanés”1976 para el que no tengo palabras suficientes.

Don Pablo, y le llamo así por el respeto y veneración que me inspira “tremendo artista” ha sabido conjugar el rollo revolucionario con el lado poético, un rollo que se llevaba bastante en los 70.En un intento por llevarse a alguien a la cama quedaba muy bien eso de estar a favor de la revolución y decir palabras de amor. Ser un utópico vendía,el resultado desde una perspectiva histórica es bastante lamentable, y ahora no se va por ahí diciendo una parida poética revolucionaria, tú dices un poema ultraísta en plan Antonio Luque, el gran poeta cordobés, tipo “el parquímetro es un obstáculo para nuestro coíto” y la bakaladera de turno te mete un puñetazo, quiero decir con esto que a Pablo Milanés el chiringuito, sigue en activo allá en La Habana y todos esperamos que por muchos años se quede en la Isla,pues ya se le está pasando en la Europa que todos Ustedes conocen, esa Europa Cyber con Linux en la Junta de Extremadura que te transporta a un capítulo de Star Trek.

“Acto de Fé” publicado en 1982 supuso un mensaje subliminal y vocacionista para el gremio de peluqueros de La Habana. Aquí le tienen en plena simbiosis mística con lo que supongo, diversos pobladores del cuero cabelludo.

En fin, mi más sincero homenaje a las que se dejaron engañar por versos tan cutrones.

Hormon Wells.

duyu espik inglis? yes yes, Spanish oil


Queridos amigos,

como les he dicho en numerosas ocasiones, el landismo es un camino de perfección ibérico y, en el fondo muy fondo de nuestro ser, por muy sofisticados y europedos que nos pensemos, todo macho hispánico lleva un Alfredo Landa en su interior que surge, se manifiesta, toma el mando de la situación cuando cruzamos los Pirineos o cuando nos vamos allende los mares.

Hace unos meses que Alfredo Landa, Paco Martínez Soria y José Luis López Vázquez (¿o era Gracito Morales?) fuimos a Nueva York, a dar una vuelta por allí, a ver qué se gusaneaba por la Gran Manzana, a tomar un vermut en la Quinta con Broadway y una Brooklyn Lager (o dos) en Brooklyin. Un viaje cojonudo.

Ansiosos por conocer la movida nocturna neoyorquina, ese sábado fuimos a una boite que nos había recomendado una spanish porque "era un sitio chévere con buena música hispana". Así que allí nos plantamos José Luis, Alfredo y Paco con ganas de seguir el ritmo de la música con el pie, mientras sujetábamos la barra con el codo. Vamos, lo que es la condición del landista que ya lo dijo Norman Mailer: "Los tipos duros no bailan". Sin embargo, al llegar a la boite nos llevamos la sorpresa de que, aún siendo como somos de una juventud envidiable de espíritu, de corazón y de estómago, doblábamos la edad a la mayoría de los que hacían cola para entrar. Azorados, decidimos buscar otro sitio más apropiado para desarrollar en plenitud nuestro landismo. Y lo encontramos. ¡Vaya si lo encontramos!

-- "Pregunta a ese", me dijeron mis compañeros (que no entienden ni papa de inglés) señalando a uno de los gorilas de la boite, con pinganillo y cara de malo, "por un sitio para gente un poco más mayor".

-- "The Scores", me dice el tronco sin mostrarme ni desprecio. "34th St. between 7th and 8th Ave.". Creo que ésta era la dirección.

Lo encontramos a la primera. En la puerta, un gorila nos miró de arriba a abajo antes de cobrarnos la entrada, y no precisamente barata, aunque pensamos que eso nos daría derecho a tomar una limonada "gratis" (pero, no) y pasamos al garito que ya por el toldillo de plástico que quiere ser bueno y la moqueta de feria comercial, tenía un tufillo casposo de aquí te espero. Efectivamente, nada más alcanzar la barra y pedir tres zarzaparrillas, nos dimos cuenta de que el garito estaba prácticamente vacío, de que había una chati desnudándose en un proscenio instalado al efecto en el fondo y de que, en definitiva, "The Scores" era un lupanar cutre pero con pretensiones y, encima, con una política comercial muy agresiva. Nunca he dicho que no a tantas mujeres en tan poco tiempo, porque, además, mis compañeros simpáticos, como demostraron que de "inglé" sólo saben "I prefer don't see", me señalaban a mí en cuanto se les acercaba una lumi y he aquí que descubrí una gran desventaja de saber idiomas: cuando te vas de viaje con dos paletos, te caen todos los marrones.

Un viaje, como he dicho, inolvidable gracias, sobre todo, a mis amigos Rodrigo y Cristóbal, con los que pienso repetir. Ya está próxima la segunda excursión landista del macho-machote "Con faldas y a lo loco". Imprescindible pelos en las piernas de más de un centímetro. Se llevará regla.

Con lo dicho, el no saber el inglés es, sin embargo, enormemente desventajoso si le paran a usted en la aduana en Inglaterra. A uno de mis dos compañeros de viaje, que ha ido recientemente a Manchester porque tiene allí un negociado, le dieron el alto en la aduana y le hicieron pasar al célebre cuartito lleno de espejos (un estilo "The Scores", pero más espart-ano), ese lugar luminoso y blanco en el que un tío se pone un guante de látex y dice algo en inglés que no se entiende pero que acciona un resorte automático que cierra herméticamente el esfínter. Por si acaso, que los guantes de látex los carga el diablo.

Con risa nerviosa, me cuenta Cristóbal que, al final, entendió que lo que querían los polis eran abrir su maleta (y no su maletero) porque el perro (o quien fuera) había detectado algo sospechoso. Cristóbal abre la bolsa y lo primero que saca la poli es una botella embalada con papel de estraza y cinta de embalar.

-- "What's this?", le dice el del guante de látex señalando el asunto sospechoso.
-- "Spanish oil", responde Cristóbal con perfecto acento de Stratford Upon Avon. Y es que el hombre me llevaba en el equipaje unas cuantas viandas para que su negociado no pasara hambre en la Pérfida Albión.
-- "And this?", vuelve a preguntar el policía, esta vez con una bola grande de papel de estraza, que en una fiesta de disfraces podía haber pasado por un pequeño alijo de cocaína.
-- "Spanish coffee", responde Cristóbal.

En ese momento, es probable que en el cuartito donde se tapa el agujerito ya hubiera un cachondeo importante a costa de Alfredo Landa.

-- "And THIS?", insiste Scotland Yard.

Ahora sí que la he liado, piensa Cristóbal, a ver cómo se dice en inglés esto... Ya me imagino a mi amigo tratanto de explicar la naturaleza de tal vianda a un guiri que lo más parecido a eso que ha visto en su vida es el roast beef. Se me antoja que Cristóbal se haría entender de la misma manera que hablaba mi madre a los estudiantes de intercambio que pasaban una temporada en casa, que como no hablaban bien cristiano, se dirigía a ellos a gritos y separando mucho las sílabas, como si fueran lo mismo la incomprensión y la sordera.

¿No ven a ese Alfredo Landa diciendo:

-- "LO-MO I-BÉ-RI-CO".

a berrido limpio en la aduana de Manchester? Pues yo sí. Además, lo veo imitando al cerdo a cuatro patas por el cuartito

-- "DE CER-DO. OINK OINK".

y señalándose a la espalda,

-- "LO-MO DE CER-DO".

ataviado con unos calzoncillos blancos y con la camiseta de tirantes arremetida por dentro. De ser yo, lo habría hecho así. Landismo es tradición.

X. Landa-Murguía

miércoles, marzo 15, 2006

Xaponés Carmiña


Papichulos:

Lo primero que uno puede pensar al ver la foto de este individuo es que se encuentra en un descanso, un “cofee break” que diría algún pedante, de un rodaje remake de los Power Rangers o tal vez que el Chino Cudeiro promociona una nueva moda en las tiendas de veinte duros .Pero no, se trata de algo diferente, de la nueva moda entre las grandes fortunas del siglo XXI.Podríamos hablar largo y tendido de las grandes fortunas del siglo XXI pero se lo resumiré brevemente: Internet ha seguido generando mucho dinero principalmente en Japón y el individuo que ven en la foto con el farmatint pasado de fecha no es otro que el millonario nipón Daisuke Enemoto. A pesar del farmatint, a pesar de esa cara permanente de alteración emocional que delata rasgos de cretinismo crónico el Señor Enemoto conocido en su país como Dice-K es un genio del billete con sólo 34 años y espera después de haber pagado sus 16 millones de Euros que le enseñen “a eso de montar en cohete”.

Dice-K que es un nombre muy apropiado para una banda de hip-hop de Alcorcón con sus componentes vestidos de chunda y pintando grafittis cutres, consiguió su fortuna con una tienda de servicios por Internet y dimitió antes de que se descubriera el fraude de acciones que llevó a los directivos más viciosos y menos enterados, incluído su fundador un tal Horeimon ,a la cárcel, con los consabidos escándalos que se dan por esas tierras: suicidios, suicidios en honor de los suicidados y más suicidios por la culpabilidad del suicidio de los suicidados. Hablamos de la empresa Livedoor Co, una empresa que para cualquier frikie como por ejemplo Palolo y Fito Frikie es como la Coca-Cola, bastante conocida en esos circulos del TCP/IP, del array, del Meta dato....

El afortunado viajero del próximo viaje espacial dice enfrentarse ahora a un reto igual de importante, aprender ruso y esto ya produce una mayor congoja que montarse en una lanzadera a todo rabo . Yo pagaría pasta por ver un DVD de las lecciones de Ruso-Japonés de Dice-K aplicadas al despegue y aterrizaje.Imaginen los caretos, las emociones de este hombre al saber que verá el “mundo en su inmensidad” como diría el pelopollez de Pablo Milanés.Imaginen los consejos mal entendidos del Nipón en plena órbita....sería una vuelta al legendario programa Humor Amarillo, es muy probale que podamos ver en televisión las experiencias de Dice-K, yo ya soy su fan y desde luego que no soy nada fan de Pablo Milanés, pero eso es otra historia.

A Pam, pan (y moja) y al japo, lechuga


Queridos amigos,

ante todo tenemos que darles las gracias a todos ustedes porque ayer superamos el hito de MIL VISITAS (que se dice pronto) pero no desde que comenzáramos a escribir el blog, allá por el mes de diciembre, sino desde que los deditos hábiles de Hormon Wells instalaron el contador de entradas. Yo soy absolutamente inepto (en eso, también) y hay que reconocer que, como demostró ayer en la tronchante "Slodoban que te adoban", Hormon tiene en los dedos finura de carterista. El contador se puso exactamente hace 19 días. Gracias a todos amigos y amigas, estamos en familia. Dejadme que piense en George W. Bush que, si no, me arranco a llorar.

He perdido hoy un montón de tiempo buscando la foto de nuestra vicepresidente, Maritere, haciendo el baile del pimpollo en Maputo (Mozambique), ataviada con unas mantas del lugar que apenas lograban disimular el traje reflectante, pero de superdiseño discreto, discreto que me llevaba la mujer en su gira africana. Para mí que las lugareñas la cubrieron de mantas para camuflar una indumentaria atractiva para los leones, sin darse cuenta de que: 1.- Ella va siempre así de elegante que, me parece a mí, es demasiado envoltorio para tan poco regalo; 2.- Ella es quien se come a los leones (y eructa cuando acaba).

Fijense que se encuentran chorradas en Internet de todos los colores, pero para una cosa importante y fosforito que necesita uno, nada. Me he dado cuenta, al rato, de que estaba perdiendo el tiempo miserablemente ya que a buen seguro que todos ustedes tienen clavada en la retina esa imagen, fresca en su memoria como una lechuga. Ese viaje que acabó en Maputo, que es donde empezó, porque dijeron Carmen Alborch, Carmen Cafarell y Leire Pajín "Yo mapunto" y se fueron todas para allá a hacer el baile del mzungu. Pues nada, hijas, a bailar se ha dicho a costa del presupuesto.

Este viaje es, por fin, la constatación de que la igualdad de genero está instalada en la clase política. En esto, desde luego, están dando una lección a la sociedad: hombres y mujeres hacen uso del mismo morramen descarado y emplean, para ello, las mismas excusas inconsistentes, grandes lemas, palabras vacías, en plan "patriotismo social" y otros greatest hits de la desternillante clase política que nos ha tocado sufrir. La excusa de estas mujeres de pro (y quiero pedir perdón porque no sé si es correcto decir eso o hay que decir "mujeres de pra") era... chan, chan...

"Luchar por la erradicación de la pobreza femenina en el Tercer Mundo".

No estaría mal que viajaran a Japón, se pusieran un kimono de floripón y manifestaran su solidaridad con la lucha contra el exterminio de ballenas hembra. Este lema es, además, mucho más completo, porque a la parafernalia pseudoprogre con que se visten habitualmente Maritere and co. (que les queda igual que un traje de Carolina Herrera), a la carga habitual de agitprop feminista, solidaria, tolerante (ni racista ni homófoba) y de supuesta izquierda, se añade un puntito ecologista que está de moda rabiosa y que se echa en falta en el tema de Maputo. Este es el pack completo del izquierdismo "cómomolo" que gasta esta gente que trata de acaparar y de monopolizar valores que son de todos, señalando con el dedo y tachando con tres cruces (machista, facha, intolerante) a quien no comulgue con sus piedras de molino o sus trajes fosforescentes o su baile del pimpollo. Para mí que ser de izquierdas es una cosa muy distinta a ser sectario con Dolce Gavana, tirando de presupuesto para saludar a las negritas (a los negritos que les den) mientras en España, en Madrid, las mujeres lo tienen negro para ser madres y trabajar al mismo tiempo. Este sí es un problema que debe solucionar Maritere, pero no con chorradas sin dotación presupuestaria como la paridad, que es como ella misma con un Jean Paul Gaultier: muy bonito pero sin chicha. Propongo el lema

"Luchar por la erradicación de la pobreza mental feminista en todo el mundo"

para sustituir al de Maritere.

He de decir que mi búsqueda por Internet no ha sido, sin embargo, en vano. Me he topado de bruces con una... no sé si llamarlo perla o melón... vestida de lechuga plastiquera. Pamela Anderson, esa persona entrañable que fomenta el onanismo, se ha prestado de imagen para una campaña de unos seres nefastos que confunden vegetarianismo con respeto a los animales. PETA (Personas por la Ética en el Trato a los Animales, y no como están ustedes pensando, cerdos machistas, Pamela Esas Tetas Apasionan) quiere fomentar la dieta vegetariana en Japón y, para eso, usa la carne recauchutada de Pam. Y no está mal pensado siempre que la receta sea la siguiente: se coge a la "actriz", se le quitan las lechugas, se entregan al vegetariano y se come uno la carne. Así, todos contentos. .

Estos tipos de PETA ya han anunciado que van a venir a montarla para los sanfermines (y no es broma) y como yo creo firmemente en que todo el mundo tiene derecho a dar su opinión, aunque se digan tonterías (como las que digo yo), pues me parecerá muy bien que para San Fermín pongan en marcha una campaña para que los pamploneses y visitantes dejen el rabo de toro, se lo pasen en un tupper a Maritere (que le hace falta) y se coman sólo la guarnición. Lo malo de PETA, ¡esa asociación de fumadores de hachis! (si no lo digo, reviento), y demás salvadores de la ignorancia es que no van a dar su opinión sobre los toros, vienen a mostrarnos la luz y el camino del bien... Bueno, y a por un poco de publicidad, que hay que pagar a Pam.

X. de la Vega-Murguía

martes, marzo 14, 2006

Slodoban que te adoban




Chusma ignota:


Slodoban Milosevic fue en los 90 a golpe de mortero y francotirador, el enemigo público número 1 de Europa. Sus biógrafos hablan de él como un niño raro, al que no le gustaba hacer gamberradas y devoraba libros y al que le gustaba la soledad: “Espiaba a sus vecinas e imitaba al urogallo en celo” dice una de sus vecinas, Sonja Kardic. Un ejemplo de macarra del Este, ya saben, esos que van con el Opel Corsa con los cristales tintados, el pelo rapado, cincuenta collares de oro robados en un palo en Villaverde, cinco recortadas pasadas por la frontera sin que los señores de la benemérita se enteren junto con cinco pibones salidas de una película porno. Lo que pasa es que Slodoban ya era talludito cuando lo de la apertura y la real politik y se aficionó más a un estilo de cutre-sobriedad-austeridad en el vestir con trajecillos de tergalillo de mercadillo from Istambul con aire acampanado en el pantalón y chaquetillas de almirante, y revivalista en el peinado : ese pelo nueva olero revival del abuelo de los Monster que marcó una época y que estoy completamente seguro que inspiró a Kiko Veneno para los versos de la canción de Los Managers cuando dice aquello de “ni sellos ni cosas de esas, que no hay quien le quite a mi niño, esa dichosa cabeza”. Y es que Slodoban será durante mucho tiempo el paradigma de cabezón eslavo.

La rueda de la fortuna ha decidido poner fin a la vida de Slodoban Cabezovic Milosevic de una forma un tanto surrealista. Al parecer, según comentan agencias, los médicos siguiendo posiblemente los protocolos del Ministerio de Sanidad español, vértice de la medicina mundial y liderado por personas psicológicamente fallidas que encuentran en el consumo de cigarrillos la huella de Satán, decidió suministrar un cocktail mortífero a este auténtico führer del Pan Cabezonismo Eslavo, un tour de force contra su hígado. Slodoban llevaba ya unos añitos siendo la novia de los presos de alta seguridad en una cárcel holandesa, estaba ya acostumbrado a cantar canciones de “chetnik” para ellos y acostumbrado a la mantequilla, entonces surge la duda. ¿Cómo se iba a suicidar?, y aquí surge ya un tema muy pero que muy interesante para investigar ¿como en un un país tan sumamente civilizado como Holanda se iba a asesinar a un genocida como Milosevic? Y la respuesta es bien sencilla: No había presupuesto para gorros.Decisión final: pues la que toman los sajones en estos casos: pulirse al colega de una forma chapucera. Se ha tratado de un final horrible con Slodoban mandando una carta, una pena que esta gente no conozca las infinitas posibilidades de la red, en plan tendencia decimonónica Conde de Montecristo al gobierno ruso. Slodoban sospechaba algo, sabía que le quedaban pocos días y que su caja de pino le esperaba. Tengan en cuenta que lo de Milosevic es únicamente una experiencia piloto para acabar con otro sátrapa de nuestros días: Sadam Hussein, porque Hussein: tú eres el próximo.Slodoban en sus alegaciones ante la corte penal tenía un estilo muy de heredero del control mental, así en plan doblar cucharas que era lo que hacía esta gente porque no tenían para comer y servía como sustitutivo.Completamente frío emitía esas frases de acento cirílico: “atacratchi, spomeva racrackchi”algo así como “no reconozco a este tribunal,hijos de puta”, en el lado opuesto, los espectáculos de Hussein son más barriobajeros : gritos, soflamas, aspavientos, escupitajos, el juez acojonado, el abogado con la toalla en la cabeza apunto de la insolación por los focos... . Más mediterráneo y espectacular por supuesto y con un share en el Middlewest bastante aceptable.

En fin,Slodoban pasa a engrosar la larga lista de frikies perdedores de todos los tiempos.

Desde el maravilloso mundo del extrarradio madrileño Norte.

Hormon Wells

Guárdate de las idus de marzo


Queridos amigos,

hace unos días que mi hijo Rodrigo, que hoy mismo cumple cinco añazos... ¡Parece mentira, coño! ¡Qué melancolía me produce el tiempo ido...! Esto me hace pensar en Marcel Proust, pero invertido (aunque el francés ya era de por sí invertido y con bigotito o, como decía él mismo, uranista) porque, al hilo de ese tiempo perdido, mi frágil memoria alcanza a recordar que me he dejado las magdalenas en la cocina... Ahora vengo.

Como decía, hoy es un día verdaderamente especial en el que mi hijo cumple cinco años como cinco soles así que se van a tener que tragar una sesión de orgullo paterno, porque, como saben sobradamente, mi Rodrigo es listo, simpático, gracioso, sinvergüenza... Si le hubieran visto ayer emocionado ante la perspectiva de su cumpleaños, dando saltos en la cama... En fin. Por eso tiene que ser él el centro de la entrada.

Quería contarles que hace unos días que mi cumpleañero se arrancó con su primera vocación: él, de mayor, quiere ser guardia.

-- "¿Guardia civil?".
-- "No, papá, de los que ponen multas".

No me gusta llevarle la contraria porque se hace un lío y acaba cambiando de opinión, por eso me callé que en lides sancionadoras el equipo verde es el campeón. Vamos, no tiene parangón.

-- "Y, ¿por qué, hijo? ¿Por qué quieres poner multas?".

El primer capítulo vocacional de mi hijo es, en verdad, el inicio de las desavenencias generacionales: con lo que he bramado yo contra las multas, resulta que mi Rodrigo quiere formar parte del aparato recaudador del ayuntamiento. Luego lo pensé mejor. Los niños no sacan estas fantasías que no vienen a cuento de ninguna parte, su cabecita lista no funciona con estímulos espontáneos que surgen de la nada como los cisnes con gripe aviar. Todo tiene un precedente, algún suceso extraordinario ha acaecido en el germen de la vocación multera de mi hijo, algo de lo que ha sido testigo, que ha visto u oído. Concluí que mi primera impresión podría haber sido precipitada, así que insistí:

-- "Rodrigo, y ¿por qué quieres poner multas?".
-- "Para ponerle una a Mamá...".

¡Tu quoque fili!, reaccioné con el dramatismo de un Julio César acuchillado...

Por cierto que mañana son las idus de marzo y hará 2.050 años del magnicidio de César y se me hace raro que ningún periódico haya sacado un coleccionable del tipo "La guerra de las Galias" en fascículos ¡y le regalamos este fantástico juego de cuchillos capaz de dividir las Galias en partes tres!. No se habrán enterado.

-- "¿A Mamá?", pregunté incrédulo. ¿Mi querido hijo, como si fuera un Bruto multero, le clavaría una receta en el parabrisas al coche de su madre?
-- "Sí, a Mamá... pero sólo cuando aparque mal".

¡Ah, bueno! Si es justo, es justo... ¡Anda, coño! Así que era eso. O sea que mi hijo tiene vocación de espía de la KGB que me informa en clave de que a su madre le han cascado una multa, probablemente de la hora. Pues nada, una más para el bote. O quizá tampoco, quizá su primera vocación sea convertirse en parquimetrero. ¡Qué horror! Espero que esta traición filial no se materialice. Prefiero que se me haga del Madrid... Bueno, no. Prefiero que sea parquimetrero, pero me guardaré de las idus de marzo, por si acaso.

Cayo X. Bea-Murguía

Recuerdo a quien le pueda interesar que otro que está hoy de cumpleaños es Raúl García de Frutos. Guarda relación con el tema. ¿No fue Julio César acuchillado por detrás? ¿Qué me pasa a mí cada vez que le doy la espalda a Raúl? Pues que me intenta clavar la raqueta por el mango o me propina un pelotazo. Así es de bruto y de traidor. Felicidades, Raúl, hombre. Monta esa fiesta de la espuma de extintor en Parque Robledo... Bueno, cuando te suelten de Quitapesares, quiero decir. Todos tus "amigos" lo están deseando... Por cierto, ¿tienes zodiacs? ¿Champú para el Abuelo? ¿Plantas de la madre de Josefo? ¿Frutitas de plástico?

lunes, marzo 13, 2006

Verdadera y auténtica Alonsomanía


Queridos amigos,

la blasfemia española que voy a decir esta mañana de luna llena quizá sí se fundamente en ese espíritu de contradicción que tanto me define. Aunque tal vez no. Tal vez sólo sea el calvo de Telecinco, su complemento, que es como el de la lotería pero con esos cascos tan gordos que le hacen parecer un personaje de Star Treck (no sabría decir cuál porque no soy freak). Y ya, cuando suelta la frasecita esa "Si parpadean se lo pierden", que no lo aguanto porque justo pasan a publicidad y tú te quedas ahí, con los ojos como platos que ya hasta te lloran, viendo un anuncio de Garrafón...

En definitiva, que le estoy cogiendo gatu al Frenando Alonso.

Para mi gusto fue un feo desplante a sus frikis que anunciara el cambio de equipo, después de que media España cañí (España es ansí) se hubiera comprado esa camisa azulona hortera, que si la llevas en el coche la Guardia Civil no te multa porque pasa por ser el chaleco reflectante. ¡Qué poca consideración hacia ese José Pipe que ha llorado emocionado, abrazado a la cruz de Don Pelayo, porque en su cumpleaños los amigos le han regalado esa camisita tan preciosísima! Si hasta ha aprendido a doblarla y guardarla en el armario él solito. Un feo en toda regla.

Conmigo empezaron a cagarla cuando le dieron el Príncipe de Asturias porque, claro, que el chico tiene mérito es incuestionable, pero... ¿Qué pasa con Ángel Nieto? ¿O con Carlos Sainz? Ambos también marcaron un hito histórico en el mundo del motor y, por cierto, Sainz con un gafe de copiloto que es ciertamente reseñable ("Trata de arrancarlo, Carlos", es una frase cumbre del deporte español). Eso mosquea en el asturiano: no se puede explicar por qué, si Giancarlo Fisichella y Alonso llevan el mismo coche, siempre se le rompe al italiano... ¿Mala suerte o que, cuando nadie le ve, le arranca un manguito a su compañero? No me extrañaría. ¡Con esa sonrisita de chacal trepa!

Como he dicho, le estoy cogiendo gatu al Frenando Alonso y lo único que le puede salvar ya del ostracismo total al que le estoy condenando es que el año que viene va a conducir a 300 por hora con un anuncio de whisky en la chepa. Esto sí podría ser motivo para depositar de nuevo mi simpatía en él.

Ahora que hay una cosa que tiene que cambiar, porque lo que no me gustó nada, pero nada, nada, nada de la victoria de ayer de Alonso es que hiciera el payaso para celebrarlo. La ausencia de elegancia en el triunfo denota una gran falta de respeto hacia el contrario vencido y es señal de tener muy poca clase. Esto es algo que caracteriza a seres tan despreciables como Valentino Rossi, personaje por el que siento un profundo asco. Lo del año pasado tiene un pase, si me apuran. Conducir sin manos haciendo gestitos con los dedos está bien y es respetuoso con los demás (aunque piensen en qué pasaría si ustedes hiciesen lo propio delante de la Benemérita). Pero lo de marcarse una salida del coche en plan lagarterana, brazos en jarra y pedorreta, con ese movimiento de cadera propio de una bailarina de jota que menea el manteo y luce el jubón a mí no me gusta Es como los que están jugando a las cartas y se chotean de los amigos vencidos (que encima les han dado de comer). Esto es muy feo y sólo se permite en el mus y en la garrafina, porque la humillación al contrario está implícita en la mecánica de ambos juegos. Pero en la Fórmula 1, o en Moto GP, o en la canasta, eso no se hace. Es de baja estofa.

Así que, desde ayer, le he puesto dos cruces y ya padezco lo contrario de la Alonsomanía, es decir, manía a Alonso y no por ser español voy a desear que gane. Eso es algo contra lo que siempre he peleado en el tema deportivo: ¿voy a vivir mejor porque este pollo gane el Mundial? ¡NO!. Pues que le den, que a mí la gente con poca clase me toca las narices, sea español, sea esquimal caraculo o sea de Tumbuctú. Además, ¿no somos ahora todos europedos? Pues este año quiero que gane el Mundial de Formula 1 Nico Rosberg por dos razones: porque es europedo como yo y porque a su padre, Keke Rosberg, le dedicó una canción Siniestro Total. Creo que estarán de acuerdo conmigo en que este último es motivo más que suficiente.

X.Brrrrr-Murguía

(Minum mini on Keke Rosberg... Tardas demasiado /// cuando entro en boxes /// te la estás jugando /// yo soy Keke Rosberg /// yo soy Keke Rosberg /// y tú eres un mecánico fatal).