lunes, diciembre 14, 2009

Haidar, una guerra justa


A estas alturas de la película, Zapatero ya tiene que haberse dado cuenta de que gobernar no tiene nada que ver con materializar las ideas. Sí, porque es facilón y tiene buena prensa, en todo aquello que se refiere a cabrear a los curas o sacarlos a la calle. Esto todavía, en esta España clavada en la cruz, increíblemente tiene público, por mucho que luego sean esos mismos votantes los que abarrotan de fervor el animismo de las procesiones, que es idolatría pura y dura.

Estaría bien visto hasta que, por ley, la Cruz Roja dejara de llamarse Cruz Roja y se llamara sólo La Roja. Porque que los monseñores salgan a la palestra a amenazar con herejías, excomuniones, fuego eterno y otras armas dialécticas de peso semejante es hasta divertido, si no fuera patético, si no borrara la niebla informe que separa lo cómico de lo dramático: no hay nada más triste que alguien que se toma en serio su actuación mientras el público se ríe y se muere de vergüenza ajena. Estos son como los frikies que invadieron la tele hace unos años. Igual. Personajes de Amenábar. Lo mismito.

Pero llega Haidar y, ay, aquí ya no somos tan valientes ni tan idealistas. La mujer nos ha metido en un problema serio y ZP es incapaz de resolverlo porque eso sí que tiene mala prensa, sobre todo entre los suyos. Si Zapatero fuera hoy el jefe de la oposición, lo tendría cristalino: se habría puesto al frente de la manifestación, como hizo en tantas ocasiones en el 95, no habría sido "leal", como hoy le exigen a Rajoy.

Los suyos son de esa cuerda.

No creo equivocarme si digo que la inmensa mayoría de los votantes en este país son pro-saharauis, entienden y comparten la lucha de Haidar, saben que ese drama está en la zona más alejada de lo cómico y abominan de un régimen, el marroquí, que es dictatorial, que nos torea y que se quiere apropiar del Sahara, sí, pero también de Ceuta, Melilla y Canarias. No es listo el Mohamed, ni nada.

Zp tiene ese problema, pero no quiere mojarse, porque le podrían poner los morros como a Berlusconni. Si hay que amoratar a alguien los ojos, por la segunda huída española del Sahara que supone dejar que Aminatou Haidar muera en Lanzarote, que sea a Moratinos. Porque, claro, aquí hay que decidirse, dar la cara, decantarse y eso es algo que Zp, el indefinido, lleva mal.

Marruecos no da opción: o conmigo o con los pobrecitos refugiados del Sahara Occidental. ZP, en el fondo de su alma de buhonero, cuenta votos de un lado y otro y lo tiene claro: renta mucho más posicionarse con los niños que viven en tiendas de campaña en el desierto, con un Frente Polisario desactivado, con esos actores que van y vienen y salen (con poquita fuerza) en la tele pidiendo la liberación del Sahara...

Pero la Otan (sobre todo Francia y Estados Unidos) no están de acuerdo. Ellos carecen de ese problema electoral que es el Sahara Occidental, porque sus ciudadanos no tienen mal la conciencia: ellos no dejaron los fosfatos saharauis de la noche a la mañana para que se los apropiara el sátrapa de Hassan II con esa invasión en toda regla que fue la Marcha Verde. Fuimos nosotros. Ellos ven en Marruecos un bastión contra el islamismo, como en su día Ike vio en Franco un dique de contención del comunismo, y lo último que quieren a 13 kilómetros de Europa es inestabilidad, la que proporcionaría una "democracia" joven e inexperta en un Sahara Occidental independiente, donde, si se les permitiera votar, podrían llegar a decidir que quieren que les gobierne algún ayatolah iluminado, antioccidental y peligroso. ¡NO! Ya dejamos votar a los palestinos y nos salieron rana. Ni hablar. Si hay elecciones, que sean como las de Afganistán.

En el fondo, Zapatero ha conseguido parecerse a Obama. Si los miras de lejos, así como a dos kilómetros, te das cuenta de que son igualitos. La misma verborrea convincente y poco más, salvo que, en lo blanco del ojo, Obama manda 30.000 tíos más a la guerra en vísperas de recoger el Nobel de la Paz, se planta en el parlamento noruego y asegura que hay guerras justas. Como Vegecio: "Si vis pacem, para bellum". Si quieres la paz, prepara la guerra.

Eso es gobernar, José Luis: que Haidar te quite la careta, tomar decisiones que tus votantes no van a comprender, desgastarse y arriesgarse a perder las siguientes elecciones porque cuando uno es presidente del gobierno ya no puede salir cantando "Paz y amor", "No a la guerra" ni "Freedom for Palestina". No.

Cuando uno gobierna, tiene que ponerse de pie ante la bandera de Estados Unidos. Tiene que recibir en Moncloa a sapos y a culebras. Tiene que asumir que la justicia nunca puede ser universal, que la libertad de muchos se sostiene en la esclavitud de tantos, que decidir es descartar, que beneficiar a unos es perjudicar a otros, que si hay opulencia es porque hay necesidad, que existen las guerras justas y, por desgracia, dictaduras necesarias.

X.Bea-Murguía (bota a ZP)

Noten el tono irónico de esta entrada, escrita por alguien que cree que es necesario solucionar el asunto del Sahara Occidental, que la Marcha Verde fue una invasión en toda regla y que el pueblo saharaui, por justicia, tiene derecho a decidir su futuro.

10 Comments:

Anonymous Anónimo said...

"Cuando uno gobierna, tiene que ponerse de pie ante la bandera de Estados Unidos. Tiene que recibir en Moncloa a sapos y a culebras. Tiene que asumir que la justicia nunca puede ser universal, que la libertad de muchos se sostiene en la esclavitud de tantos, que decidir es descartar, que beneficiar a unos es perjudicar a otros, que si hay opulencia es porque hay necesidad, que existen las guerras justas y, por desgracia, dictaduras necesarias".

Qué bonito alegato del realismo político. Tucídides, Hobbes, Maquiavelo y Morgenthau aplaudirían si pudieran leerte.

Se nota que para ti el Nobel de la Paz acertado fue el de Kissinger. Ese si que aplicaba eso de 'si vis pacem, para bellum'. Para mantener la paz entre las superpotencias hizo 'algunos preparativos' en Asia y América Latina, unos daños colaterales de nada...

14 diciembre, 2009 11:25  
Anonymous Anónimo said...

Chico, aprende a leer...

Todo eso que me dices a mí, lo copias y lo pegas en el blog de Zapatero. Yo ni gobierno, ni aspiro a ello.

Por eso, estoy a favor de Haidar y del pueblo Saharaui.

Como los tuyos no aspiran ni a gobernarse ni a sí mismos, son libres de sacar la guitarra todo lo que quieran y cantarse todas las de Paco Ibáñez y de ese excelso letrista que fue Alberti. Nunca más acertado: "Yo era un tonto y lo que he visto me ha hecho dos tontos".

Tienes razón, desde que le dieron a Sajárov, el Nobel de la Paz no es lo que era.

Javier

Lo de tonto no va por ti.

14 diciembre, 2009 11:44  
Anonymous Anónimo said...

Vaya, como no fui al CEU no aprendí a leer. Lo que pasa es que creo que ZP no tiene blog, por eso lo pongo aquí.

"Como los tuyos no aspiran ni a gobernarse ni a sí mismos"

Yo creía que los míos eran los que habían gobernado durante décadas en la URRS, China, Cuba o Camboya. Ya veo que la dualidad del rojo "tonto idealista/peligroso asesino" te la sabes bien.

Esa es una de las pocas cosas buenas que, en la teoría, tiene el realismo político. Como son más importantes los intereses que las ideas, es difícil que 'perezca el mundo haciéndose justicia', como decía Kant.

Pero la historia está llena de muertos por intereses disfrazados de ideales, sólo hay que mirar a Irak...

Por cierto, Alberti era estalinista, ¿no?

14 diciembre, 2009 13:03  
Anonymous Anónimo said...

Bueno, hombre, no te enfurruñes, que yo, aunque me ponga en plan borde, todo lo que te contesto es medio en coña.

Con los tuyos, me refiero a Izquierda Unida (et plus ultra).

Lo malo del idealismo es que, tarde o temprano, viene la vida y te da una ducha de realismo, político o no.

Alberti no es santo de mi devoción. No es ni santo. Independientemente de sus ideas, que me parece muy bien que tuviera las suyas (aunque creo que equivocadas), no me gusta su poesía. Nada más. En aquella época, me temo, había mucho estalinista. Algunos fueron a la Unión Soviética, como Miguel Hernández, y vinieron alucinados pensando en cómo poner en marcha aquello en España. A otros, como Andre Gide, no les entusiasmó tanto.

¿Qué vio Gide que no enseñaron a Hernández? Vio que, en la práctica, los intereses son más importantes que las ideas... Son, incluso, más importantes que la vida (empezando por la de los kuliakis). Más importante que los derechos de los campesinos. Más importante que todo.

¿Ves? En eso estamos de acuerdo, en que eso muy triste, lo que pasa es que yo estoy convencido de que no existe una solución y que, cuando se ha intentado poner una, ha sido mucho peor el remedio que la enfermedad.

Javier

14 diciembre, 2009 15:50  
Anonymous Anónimo said...

Vamos a ver, Javierín, que te lo tengo dicho muchas veces. Nunca discutas con un tonto: la gente podría no ver la diferencia.

Fdo.: Al Goritmo, candidato iraquí al premio Nobel de Física.

15 diciembre, 2009 08:43  
Anonymous Anónimo said...

Ya sabes compañero, ni se te ocurra contestar a Al Goritmo, no vaya a ser que la gente piense que sois igual de tontos. Cuídate también de Martín Flación, candidato al Premio Nobel de economía. Ya sabes que ese tema no lo dominas mucho…

Por otra parte, preguntas lo siguiente: “¿Qué vio Gide que no enseñaron a Hernández?” Pues no sé, pero me parece que no es tan profundo como lo que tú apuntas. O quizá lo es mucho más. Pego un fragmento de un artículo* interesante que he encontrado en la Web de la Fundación Nin, que no peca, por razones obvias, de estalinista:

“El 20 de junio, Gide aparece en la Plaza Roja al lado de Stalin, de Molotov y de otros altos dignatarios, y es el encargado de pronunciar la elegía fúnebre de Máximo Gorki. Esta es la situación cuando el 20 de agosto se opera un cambio en la posición de Gide. Sobre dicho cambio se han hecho diversas conjeturas, pero la más importante es la escenificación del primer proceso de Moscú en el que, la hipotética primera víctima, el propio Stalin, no es citado, y que concluirá con el fusilamiento, entre otros, de dos líderes de Octubre: Zinóviev y Kámenev. Pero el caso es que Gide manifestará su rechazo de una manera insólita: rechazando una invitación para ser recibido nada menos que por Stalin, el humilde padre de los pueblos”.

Vamos que me parece más un rechazo de los métodos del poder soviético que de su programa político. Ya lo he dicho muchas veces. Lo que se dio en la URSS no tiene nada de socialismo, fue simplemente una sustitución en los resortes del poder (del zarismo a burocracia soviética) y de la propiedad de los medios de producción (de la oligarquía rusa al estado soviético). Me parece un poco tramposo utilizar a los socialistas antiestalinistas para criticar a todo proyecto político emancipador de izquierda. Porque los hay que ni siquiera se plantean tomar el poder**.

Pero claro, en esos tiempos no era tan fácil hacer este análisis. Pego la nota 3 del artículo, una cita de Gil Albert:

“Era el momento álgido de nuestra crisis: todos nosotros, escritores, pasamos de un modo u otro por esta fase: horror por el nazismo, desprecio por el reaccionarismo español que estaba preparando la puñalada trapera a la joven, incauta, y también es verdad, medio caótica República, confianza si no ciega, si bastante embriagadora, por Rusia, engagement de Gide, actitudes de Mann, Einstein, etcétera”.



*‘Gide y el comunismo’ - Pepe Gutiérrez. Artículo publicado en el número 151 de El viejo topo, abril 2002. La edición digital procede de la publicación virtual de Batzac aunque se ha completado con los dos últimos apartados y las notas, que no figuraban en la misma. http://www.fundanin.org/Gide.htm

**’Cambiar el mundo sin tomar el poder: el significado de la revolución hoy’ (título original en inglés: Change the World Without Taking Power: The Meaning of Revolution Today), es un libro escrito por John Holloway que examina el concepto de revolución. http://es.wikipedia.org/wiki/Cambiar_el_mundo_sin_tomar_el_poder

15 diciembre, 2009 13:48  
Blogger H.Wells y X.Bea-Murguía said...

No te preocupes. Al Goritmo y yo somos tal para cual, aunque el tonto de la pareja soy yo, así que no hay problema.

Martin Flacion no sé quién es.

16 diciembre, 2009 08:00  
Anonymous Anónimo said...

Javierín, mira que te avisaron. Que no discutas con tontos. Que da igual que las cosas se hagan a prueba de tontos. Recuerda que los tontos son muy ingeniosos y por eso las rompoen. Los tontos incluso son capaces de decir que la URSS, Camboya, Albania, Rumania y toda la triste retahila no eran verdaderos estados comunistas. No, no, eran estados capitalistas, financiados por la CIA, para hacer fracasar el sueño marxista. Stalin, Pol Pot, Mao, Hoxha y todo el etcétera, en realidad eran espías capitalistas.

Fdo: Al Goritmo Capone, primo del anterior.

16 diciembre, 2009 20:11  
Anonymous Anónimo said...

"Los tontos incluso son capaces de decir que la URSS, Camboya, Albania, Rumania y toda la triste retahila no eran verdaderos estados comunistas."

Mueeeeeeee bueeeeeeenooooo...

Fdo:Albert R. Gay-r-done
Alcalde del PSOE en Madrí

18 diciembre, 2009 12:56  
Anonymous Anónimo said...

vaya trifulca mas interesante
Y por que no le dan a esta chica el desierto que pide.
Yo se lo daba

21 diciembre, 2009 22:19  

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